¿Estás pensando en comprarte un auto? Si es así, el momento es oportuno.
Los nuevos modelos vienen cada vez más equipados, y las marcas afinan los precios. Ahora bien, ¿cómo lo pagarás? Si puedes y quieres hacerlo al contado, estupendo, pero si necesitas recurrir al crédito, el periodo es bastante ventajoso. Por un lado, los prestamos tradicionales, bancarios o financieros, ofrecen condiciones de intereses bastantes razonables, mientras por otro lado, están presentes facilidades que en el pasado no existían. Lo cierto es que a diario un mayor número de gente se anima a solicitar prestamos, así lo demuestra el hecho que cada día más aumenta la demanda de esa solución para comprar el auto. El crecimiento en la demanda de créditos para autos se traduce, fundamentalmente, en una dura competencia entre financieras en las condiciones ofertadas, eso a toda ventaja para el usuario que tendrá la posibilidad de escoger el plan financiero que mas se ajusta a su bolsillo. Si se recurre a bancos o financieras, es posible encontrar créditos blandos que van entre un 12 y 18% de interés, y se podrá financiar hasta un 80% del valor del auto y plazos de devolución de hasta 5/6 años. Algunas entidades cuentan con divisiones dedicadas exclusivamente a la financiación con una serie de facilidades y beneficios.

Sin duda alguna, lo más importante de la publicidad de los créditos es el tipo de costo real de la operación, es decir, lo que al final se paga para cerrar el préstamo, no el nominal, que es el que las entidades destacan para halar a los posibles clientes. Porque, entre el interés, las comisiones de apertura, cancelación anticipo y otros, una cifra en principio muy atractiva puede convertirse en otra que lo sea mucho menos.

No es desconfiar, sino conocer bien todas las condiciones del acuerdo, así que afile el lápiz e infórmese en las distintas entidades financieras sobre los incentivos antes de firmar el contrato.