ROMA, (AP).- El gobernante Moamar Gadafi tal vez huyó de Trípoli y podría estar herido, dijo el viernes el ministro italiano del Exterior, quien citó como fuente de esas versiones a un obispo católico en la capital libia. Franco Frattini dijo que el obispo de Trípoli aseguró que Gadafi «probablemente se encuentra herido».
Según Frattini, el gobierno de Italia «carece de información concreta sobre la suerte de Gadafi». Sin embargo, «tiendo a considerar creíbles las palabras del arzobispo de Trípoli (Giovanni) Martinelli, quien nos ha dicho que Gadafi muy probablemente está fuera de Trípoli y quizá herido», afirmó Frattini a la prensa al margen de una conferencia, según la agencia noticiosa ANSA. Frattini dijo que «la presión internacional tal vez obligó a Gadafi a refugiarse en algún lugar seguro».
El ministro emitió este comentario en entrevista televisiva con el diario Corriere della Sera, en cuya página de internet fue difundida. «Yo me inclino por la decisión de una huida de Trípoli, no de Libia», aseguró Frattini.
«Libia es un país grande, con zonas desérticas». Martinelli ha criticado de manera abierta la campaña de bombardeos de la OTAN contra las fuerzas del régimen de Gadafi. Es previsible que Gadafi figure entre los tres funcionarios libios contra los que la Corte Penal Internacional emitirá el lunes órdenes de arresto.
Los recintos de Gadafi han sido blanco frecuente de los ataques aéreos de la OTAN, entre ellos el ocurrido el 30 de abril. Se cree que en este ataque Gadafi estaba en el lugar pero resultó ileso. A fin de evitar conjeturas de que Gadafi había muerto, la televisión estatal libia mostró durante la semana una reunión del gobernante con jefes tribales que al parecer se efectuó el miércoles en un hotel en Trípoli. Frattini dijo que «tenía muchas dudas de que las imágenes correspondieran a ese día y especialmente a Trípoli».
Un activista dijo el viernes que también se ha registrado una ola de manifestaciones en contra del gobierno libio en varios vecindarios de Trípoli durante esta semana, una señal de descontento que antes enfrentaba una política de cero tolerancia y fuerza bruta. Mientras tanto, los grupos rebeldes que luchan contra Gadafi recibieron un gran impulso político desde el extranjero.
Gran Bretaña prometió proporcionarles equipo de uso exclusivo de la policía y el gobierno del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, invitó a una delegación rebelde a la Casa Blanca para sostener negociaciones el viernes. El estruendo de dos ataques de la OTAN se oyó en la capital del país el viernes por la mañana. Se desconoce cuáles fueron los objetivos.