DERA ISMAIL KHAN, Pakistán. AP. Un ataque con un presunto misil estadounidense mató ayer a por lo menos cinco personas en una región tribal donde tiene su sede el principal comandante del Talibán, dijeron funcionarios, rompiendo una suspensión de tales ataques y poniendo a prueba al creciente estado de ánimo anti Talibán en el país.
El ataque ocurrió mientras la violencia se extiende con furia en otras regiones volátiles del noroeste fronterizas con Afganistán: una bomba en un mercado mató a por lo menos ocho personas, mientras funcionarios dijeron que los enfrentamientos entre el Talibán y fuerzas de seguridad causaron la muerte de por lo menos 20 rebeldes.