Prevén auge energía ecólica

Prevén auge energía ecólica

El país no tiene acceso a recursos externos para proyectos de energía renovable por la falta de un apropiado marco legal, pero se proyecta que en plazo de 10 años se pueda contar con 500 megavatios de capacidad de energía eólica.

El anuncio lo hizo ayer el arquitecto Doroteo Rodríguez, gerente de Fuentes Alternas y Uso Racional de Energía de la Comisión Nacional de Energía, quien afirmó que desde hace cinco años los técnicos tratan de lograr la aprobación de un proyecto de ley que permita el desarrollo de la energía renovable.

Dijo que el gobierno de Alemania contempla crear un fondo para ampliar el financiamiento para proyectos de energía renovable, pero la República Dominicana no tendría acceso a esos recursos si no se aprueba la «Ley de estímulo a la energía renovable».

Rodríguez habló en una rueda de prensa acompañado del ingeniero Milton Morrison, director de Energía No Convencional de la secretaria de Industria y Comercio, Bolívar Rodríguez, del Instituto Dominicano de Tecnología Industrial y Bernhard Boesl, quien ofreció los detalles de las conclusiones de la Conferencia Internacional sobre Energía Renovables celebrada el mes pasado en Bonn.

Explicó que en esta conferencia las delegaciones evaluaron la situación energética global y se comprometieron a realizar logros observables en los próximos años.

La delegación dominicana presentó su posición, recogida ya en el Plan Energético Nacional (PEN), el cual contempla, entre otras cosas, que para el año 2015 la República Dominicana tendrá instalados 500 megavatios de capacidad de energía eólica y que para el año 2012 el bio etanol abastezca al menos el 10% de la gasolina consumida en el país.

Dijo que la propuesta dominicana hizo también referencia a la promoción de otras fuentes de energía tales como las hidroeléctricas, el biogás, el biodiesel y las energías oceánicas, además de fomentar el uso racional y eficiente de la energía, sin importar la fuente.

La participación dominicana en esta conferencia surgió como una invitación del Gobierno alemán al Gobierno dominicano, vía su embajada, y de la Agencia de Cooperación Técnica Alemana (GTZ). La delegación estuvo integrada por miembros de la Comisión Nacional de Energía y del Departamento de Energías No Convencionales de la Secretaría de Estado de Industria y Comercio, los señores Doroteo A. Rodríguez Iriarte y Milton Morrison.

Esta Conferencia Internacional fue anunciada originalmente por el Canciller Federal alemán, Gerhard Schroeder, quien la presidió y delegó como anfitriones permanentes del evento a la Ministro Federal de Cooperación Económica y Desarrollo, la Sra. Heidemarie Wieczorek Zeul y al Ministro Federal de Medio Ambiente, Conservación de la Naturaleza y Seguridad Nuclear, el señor Juergen Trittin.

La conferencia internacional produjo al final una Declaración Política consensuada entre todas las delegaciones y una Agenda de Compromisos en la que cada país estableció metas de desarrollo de las energías renovables a implementarse en sus respectivos países.

Rodríguez dijo que en la actividad hubo más de 3,000 participantes y una serie de eventos colaterales a la Conferencia: exposiciones empresariales, charlas y presentaciones entre grupos regionales y eventos sociales. Dentro de este marco, Doroteo A. Rodríguez, Gerente de Fuentes Alternas y Uso Racional de Energía de la CNE expuso una presentación sobre las oportunidades de inversión en proyectos de energías renovables en el país, presentación que fue elaborada previamente por la delegación dominicana en conjunto.

«No cabe duda de que el gobierno y las industrias alemanas serán aliados de la República Dominicana en el impostergable desafío de cambio hacia las energías renovables, para que podamos lograr la sostenibilidad del sector energético del país», expresó.

[b]LA LEY[/b]

Al referirse a la ley de estímulo a la energía renovable dijo que un grupo de técnicos que pertenecientes al INDOTEC a los que se sumaron los de Industria y Comercio y de la Comisión Nacional de Energía llevan más de cinco años buscando consenso para la aprobación de esa ley, pero que se desconocen las razones por las cuales no se ha aprobado.

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