Encapuchados fuertemente armados mataron a tiros ayer tarde en San Francisco de Macorís al joven Raylin Saviñón de Aza, de 21 años, en medio de la huelga por 48 horas en demanda de que el Gobierno destituya al procurador fiscal, aclare el asesinato de un dirigente popular y ejecute obras en en ese municipio, Salcedo y Las Guáranas, también paralizados.
Saviñón de Aza recibió un disparo en el pecho, hecho por sujetos que viajaban en dos motocicletas por el sector Madrigal.
Miembros de la Policía, con médicos del Instituto Nacional de Patología Forense acudieron a alevantar el cuerpo.
En los otros dos pueblos no fueron reportados incidentes y pese a la presencia policial, todo transcurrió normal, por lo que los negocios, sobre todo del centro, abrieron y el tránsito fluyó como de costumbre, hubo docencia y trabajo.

Los organizadores exigen del Gobierno el sometimiento a la justicia de los responsables del asesinato del dirigente del Frente Amplio de lucha Popular (Falpo) Vladimir Baldera Lantigua, la destitución del fiscal de San Francisco, Regis Victorio Reyes, a quien acusan de encubrir a los agentes policiales que cometieron el hecho.
Además, piden construcción del hospital regional de especialidades médicas de esa provincia y la plaza de la cultura.
Aclarar la muerte de los jóvenes Héctor Ramón Medina, Starlin, Jhonatan Paulino, Dilenia Quezada y Ricardo Guzmán, caídos en Salcedo en medio de manifestaciones en 2012.

Las demandas generales de las tres demarcaciones son carreteras, puentes, ejecución del plan de asfaltado de las calles, saneamiento de cañadas, circuitos de energía eléctrica 24 horas entre otras exigencias.

El paro organizado por el Movimiento Social y Popular dio lugar a que las dotaciones policiales fueran reforzadas por decenas de agentes.

El subdirector de la Policía general Nelvy Luis Pérez viajó a San Francisco, donde intentó que los convocantes levantaran la huelga. Con el alcalde Antonio Díaz Paulino acordó reunirse con los dirigentes de las organizaciones que dirigen el paro.