Con la elección de la doctora Emma Polanco como rectora de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) con mas de un 60% de los votos. se comenzó hacer justicia con la mujer uasdiana, quien tuvo que esperar 470 años para poder llegar a la rectora, teniendo que ver pasar una retahíla de hombres rectores,siendo ella mayoría en las aulas desde hace varios años…
Parece increíble que esto ocurriera en nuestra ALMA MATER, llamada a ser el principal centro de pensamientos del país, en donde se debe impulsar de manera sistemática el debate de las ideas con un objetivo claro y una decisión clara de la trascendencia que tiene para el país el avance de la mujer en la sociedad.
Se argumentará que este era el tiempo de la mujer, y que la UASD es el reflejo de cómo anda la sociedad y el mundo, en la que todavía no ha habido una mujer presidenta del país ni en Los Estados Unidos de América, primera potencia mundial-.Igual en los gremios profesionales, sindicatos, empresas e instituciones,en donde solo se registran algunos casos muy contados de mujeres que hayan alcanzado la presidencia, lo cual es cierto. Pero aún así, la UASD es la UASD y tiene un rol muy especial en la sociedad, que no lo tiene nadie mas, que es el rol de crear e impulsar procesos de conciencia colectiva, sobretodo, en el respeto a los derechos humanos de todos, en especial, los de la mujer y la niñez.
De ahí el reclamo a lo interno de la academia y a lo externo .de rescatar a la UASD, para que la misma vuelva a sus orígenes, se encuentre con ella misma, y asuma el rol que esta llamada a jugar en la sociedad..
No obstante,celebramos con jubilo la elección de la doctora Emma Polanco como la primera mujer rectora de de la UASD, ella representa el avance de la mujer dominicana, universitaria en especial.
La doctora Polanco debe recibir el apoyo de todos los sectores universitarios y externos para impulsar la REFORMA QUE SE NECESITA EN ESTOS MOMENTOS .en esa academia dela patria.Ese debe ser la meta principal de todos. Que no comiencen a presionarla para seguir en lo mismo..La sociedad no lo perdonaría, pues seguiría la destrucción de la institución académica. Y a eso no debemos apostar. Se puede seguir avanzando.