Londres. EFE. El príncipe saudí Saud Abdulaziz bin Nasser al Saud fue declarado culpable ayer en un tribunal londinense de haber matado brutalmente a su sirviente, con el que mantenía una relación sexual, en un hotel de la ciudad. Después de deliberar durante una hora y 35 minutos, el jurado abogó por un veredicto de culpabilidad, al considerar probado que Al Saud pegó y estranguló a Bandar Abdulaziz, de 32 años, en el hotel de cinco estrellas «Landmark», en el céntrico barrio de Marylebone. Al Saud, cuando fue detenido apeló a su inmunidad diplomática.