El director general de Prisiones dispuso la cancelación de  la  alcaide de la cárcel de San Francisco de Macorís, Yolanda Altagracia Martínez, en cual se descubrió que una banda de condenados a 30 años estafaban a ciudadanos desde prisión.

 Asimismo el general Manuel de Jesús Pérez Sánchez dijo en un comunicado de prensa que fueron sometidos a ‘sanciones disciplinarias’ los reclusos  Ernesto Alcántara, José Guzmán Paulino y Garibaldy Núñez, sindicados como cabecillas de la organización delictiva que estafó a la comunicadora Alicia Ortega.

 A propósito de los hechos, Pérez Sánchez dijo que trabajan en la instalación de un sistema de bloqueo de teléfonos, para evitar que internos que portan los móviles de manera irregular puedan utilizarlos en acciones delictivas.

Problemática. Sobre las acciones  cometidas por internos del Centro de Privación de Libertad de San Francisco de Macorís, dijo que son un reflejo de la problemática que  persiste en las cárceles tradicionales.

Declaró que han  insistido en la realización  de requisas periódicas con la intención de incautar armas, drogas y celulares. Al respecto aseguró que  en  los últimos cinco  meses ha incautado  centenares de celulares, con lo que evitan  que más reclusos desde las cárceles cometan acciones reñidas con la ley en contra de la población.

La Banda

Según reveló la Policía Nacional la banda se dedicaba a llamar a las casas y comunicarse  con las domésticas alegando  que los propietarios o   algún familiar habría tenido un accidente grave, entre otros métodos de chantaje para obtener  dinero,  joyas y cualquier cosa de valor.

Para localizar los teléfonos y direcciones utilizaban un directorio  del que escogían,  personas de apellido o adineradas.

Según el reporte policial la banda era  dirigida por Alcántara, Guzmán  y  Núñez, con la asistencia de  Franklin  Asencio, José Bonilla  y  Ángel Mendoza.

Utilizaban a Yudelka Hidalgo, de 33 años,  quien  hizo llegar a los reclusos  de manera fraudulenta varios chips de celulares.