La directora del Instituto por los Derechos del Consumidor (Proconsumidor), Altagracia Paulino, dijo ayer que no entiende porqué la resistencia de algunos sectores a que el gas licuado de petróleo (GLP) se venda pesado, que es un mecanismo de transparencia que le permitiría a los consumidores comprobar en una balanza la cantidad real del combustible que se les despacha en las envasadoras.
La medida de Proconsumidor al respecto no exige que las envasadoras vendan el GLP pesado, sino que éstas tengan una balanza disponible en sus establecimientos para que los consumidores puedan verificar la cantidad de gas entregada, explicó. El 29 de agosto pasado Proconsumidor otorgó un plazo de 60 días a las envasadoras para que adquieran una balanza y vendan el gas pesado. La medida ha sido rechazada por algunos sectores.
Paulino explicó una fórmula que consideró buena para lograr transparentar la venta de gas. Explicó que un galón tiene capacidad para cuatro libras y siete onzas de GLP , entonces lo que tiene que hacer el cliente es pesar el tanque de gas antes de llenarlo y luego de que se le introduzca el combustible y así sabrá si le despacharon la cantidad correcta
Paulino habló en el programa Uno + Uno.