El procurador general, Francisco Domínguez Brito, abogó ayer porque en el país se cree un ambiente de respeto y de tolerancia a los sectores más vulnerables, incluyendo la comunidad LGTBI, contra quienes, dijo, se dan muchas veces situaciones que consideró “inadmisibles”.

Deploró que por razones culturales o de otra índole estos grupos sean objeto de burla y discriminación, que constituyen hechos contrarios a todos los principios de respecto en materia de derechos humanos.

Afirmó Domínguez Brito que independientemente de los criterios o la visión que se tenga sobre lo bueno y lo malo, “no es momento de juzgar, sino de apoyar, de acompañar y entender que por encima de nuestros criterios está el respeto a los demás, a los derechos humanos y, sobre todo, a aquellos grupos en situación de mayor vulnerabilidad”.

El procurador Domínguez Brito habló durante la firma de un acuerdo de colaboración entre el Ministerio Público, el Consejo del Poder Judicial, la Policía Nacional y el Consejo Nacional de Discapacidad (Conadis), en ocasión del “Día Internacional de los Derechos Humanos”.

Exhortó a los actores del sistema de justicia a prestar mayor atención a esos grupos, de quienes dijo “acuden a las oficinas de los funcionarios con miedo y sin buenos abogados”, en busca de apoyo.

Propósito. El acuerdo tiene por finalidad garantizar mayor efectividad en el acceso a la justicia de las personas con discapacidad, entre los que se incluyen los no videntes, personas con VIH y sida, narcodependientes, grupos de migrantes y la comunidad LGBTI.

El presidente del Conadis, Magino Corporán, dijo que el convenio permitirá cumplir una deuda social que garantice la igualdad de condiciones y facilidades a los grupos antes citados.