El procurador general de la República, Radhamés Jiménez Peña, afirmó ayer que el gran reto de los jueces de las altas cortes es crear un ambiente de respeto absoluto del ser humano y al orden público, y dedicarse exclusivamente a la exigente, difícil y absorbente labor de impartir justicia.
Durante una ofrenda floral ante el Altar de la Patria, en ocasión del Día del Poder Judicial, dijo estar confiado en que el 2012 traerá cambios importantes no sólo a el sistema de justicia sino a la sociedad en su conjunto, porque las altas cortes están destinadas a salvaguardar los derechos y garantías fundamentales de todos sin discriminación.
Renovó el compromiso del Ministerio Público de seguir promoviendo el fortalecimiento de la justicia y la democracia.