El procurador general de la República recomendó hoy que luego de cumplir los 18 años, los jóvenes pasen a los centros de corrección y rehabilitación para adultos del nuevo modelo de gestión penitenciaria que implementa la Procuraduría.

Francisco Domínguez Brito hizo esta aseveración al referirse a la modificación del Código de Protección de Niños, Niñas y Adolescente, el que considera agravó el sistema de corrección porque esos menores, con grandes limitaciones materiales, no pueden permanecer hasta los 25 años recluidos en esos centros ya que los de 16, 17 y 18 años, a través de mecanismos, abusan sexualmente de los menores en horas de la noche. 

Dijo que con la modificación al Código no se registraron efectos positivos en el país, porque el aumento de la pena no resuelve el problema de la delincuencia juvenil.

Indicó que esto crea un conflicto dentro del sistema de protección de los menores, al establecer que se mantengan recluidos en esos espacios hasta los 25 años.

Reconoció que el sistema de protección de niños, niñas y adolescente es bastante complejo de administrar y que además cuenta con pocos recursos para individualizar por grupos.

“No podemos poner una camisa de fuerza al sistema con adultos de 22, 23 y hasta 25 años, además de que es irracional porque la pena máxima es de ocho años, lo que no encuentro la más mínima lógica”,  enfatizó.

Destacó que esa modificación  está desfasada de la realidad social y material del país, tras destacar que  lo único positivo que tiene el aumento de la pena es la satisfacción a la sociedad dominicana y más aún de la víctima, que se siente segura de que esa persona no saldrá tan pronto del recinto donde está recluido. 

El procurador habló del tema al participar en la conferencia “Nuevas Modificaciones al Código de Protección a Niños, Niñas y Adolescentes con énfasis en el aumento de las penas”, que se desarrolló en un hotel de la capital,  auspiciado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Niños de Camino y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), entre otros organismos.

Crearán centros de corrección. Igualmente anunció que se proyecta implementar un centro de corrección para menores en La Romana, y que se discute la Ciudad del Niño, en Santo Domingo,  para recluir a unos 200 ó 300 niños, niñas y adolescentes en conflicto con la ley.

Agregó que esos centros también funcionarán como internados para menores que deambulan por las calles, con un personal especializado en el tema de la formación de esos jóvenes, incluyendo psicólogos, educadores y otros técnicos que trabajen en la enseñanza de cursos técnicos, entre otros.