El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, afirmó ayer que la justicia penal dominicana necesita un “reacomodo” que permita simplificar algunos procesos, a fin de que en los tribunales haya menos aplazamientos de casos.

Dijo que también es tiempo para que los defensores públicos se revisen y gasten sus energías más en contenido y fondo, que en procedimientos, aplazamientos y en gastos que no permitan un resultado. Indicó que si bien es cierto que cada día hay más defensores públicos (jueces y fiscales), la atención cada vez se hace más difícil por la alta población penitenciaria que hay en el país.

“Tenemos que redefinir todo lo que estamos haciendo porque la población penitenciaria nunca antes en la historia había estado mayor; hay más de 25,500, más la población de menores que suman 500, y todos son temas que realmente tienen que preocupar”, dijo Domínguez Brito.

El procurador habló así en repuesta a la advertencia de la directora de la oficina Nacional de la Defensoría Pública (ndo), Laura Hernández, de que no recibirán más casos a solicitud de los tribunales hasta que el Gobierno revise el presupuesto de esa dependencia. Más que dinero. Domínguez Brito consideró que para resolver la situación planteada tal vez no necesariamente sea más presupuesto ni más personal lo que se necesite, sino revisar los procedimientos.