POR DIEGO PESQUEIRA
El procurador general Víctor Céspedes Martínez recomendó ayer a las nuevas autoridades que asumirán el poder el próximo 16 de agosto a actuar con prudencia en la administración de justicia y «no desesperéis en sus ejecuciones», a la vez que pidió al presidente electo Leonel Fernández incumplir con la promesa «e’pa’ fuera que van» dentro del ministerio público.

Se refirió a la capacidad de miembros del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que podrían ocupar cargos de importancia dentro del ministerio público, pero estimó que hay muchos hombres y mujeres capacitados fuera de esa organización que ganó las pasadas elecciones que pueden seguir en las funciones de fiscales.

«Reconozco la capacidad de todos los abogados que podrían ocupar el cargo de procurador general de la República. Por esa razón no quisiera hacer ninguna recomendación, pero si quisiera pedirle prudencia en sus actuaciones en la administración de justicia y que no olviden que todo pasa», precisó.

Al participar como invitado del Diálogo Jurídico de HOY, dijo que espera que no se cumpla a totalidad la expresión «e’pa’ fuera que van» por lo menos en el ministerio público, donde entiende hay fiscales capacitados y aptos para asumir su rol dentro de la reforma procesal, que entrará en vigencia en septiembre próximo.

«Quiero solicitarle al presidente Fernández que no cancele a todos los fiscales, puesto que hay muchos que se han capacitado para aplicar el nuevo Código Procesal Penal y además al país le conviene que se escojan los mejores hombres y mujeres», manifestó.

A su juicio la sociedad perdería fiscales con vocación de servicio en caso de que haya una aplanadora el próximo 16 de agosto.

DEJÓ BASES

En cuanto a los fiscales y su capacitación, alegó que dejó las bases para que cada abogado se capacite en la Escuela del Ministerio Público.

Dijo, además, que con la cooperación del Programa de Reforma y Modernización del Estado (PARME) se evaluó a más del 50% de los fiscales, procuradores de cortes y fiscalizadores, lo que a su entender puede ser utilizado por las próximas autoridades.

«Hay evaluaciones que se pueden tomar en cuenta, puesto que ya se realizó una y se conoce donde hay que fortalecer a los fiscales», dijo.

Céspedes Martínez alegó que las nuevas autoridades tendrán en sus manos instalaciones adecuadas para capacitar a los fiscales en la aplicación de la reforma procesal.

CÓDIGO

Sobre la reforma procesal aseguró que dejó la estructura lista para su puesta en ejecución.

Dijo que el presidente Hipólito Mejía aprobó la erogación de RD$300 millones que serían necesarios para que la Procuraduría cumpla la parte que le corresponde a partir del 27 de septiembre.

Empero, Céspedes Martínez señaló que serán las próximas autoridades las que deberán cumplir con esta partida económica.

Citó la inauguración del edificio de la fiscalía de Santo Domingo como un paso de vital importancia en la aplicación del nuevo Código.

En esta jurisdicción, dijo, se empezará a aplicar la reforma en un 100%.

DEFIENDE REFORMA

Céspedes Martínez defendió el nuevo Código Procesal por entender que transformará el sistema de justicia penal en el país y representará mayores garantías constitucionales.

Estimó que la sociedad dominicana demanda eficiencia en la persecución penal, debido a que se incrementa la delincuencia en todos los sentidos.

Manifestó que la reforma favorece la aplicación de los procedimientos, la solución anticipada de los casos de mínima «lesividad o bagatela», en los cuales se pueden armonizar los intereses en conflicto de un modo sencillo, reservando para el juicio aquellos casos más graves.

«Este sistema permitirá superar los modelos inquisitivos y su sustitución por sistemas de corte acusatorio, adversariales y garantistas, de acuerdo a las proclamas constitucionales de nuestros países», agregó.

MAYOR SATISFACIÓN

Céspedes Martínez confesó que su mayor satisfacción fue haber modernizado la Procuraduría, humanizado el sistema penitenciario y luchar por el respeto a los derechos fundamentales de las personas.

«Nadie puede negar que he trabajado sin descanso para modernizar la Procuraduría, humanizar las cárceles y proteger los derechos fundamentales de los ciudadanos» dijo.

FRACASO

Para el Procurador su mayor fracaso ha sido no tener el tiempo suficiente para cumplir con su programación.

Sostuvo que en su gestión de un año y ocho meses no cumplió ni con la cuarta parte de sus planes.

«El tiempo ha sido mí mayor fracaso, puesto que no pude cumplir con todos los planes para mejorar las cárceles y otras áreas del ministerio público,» afirmó.

SIN PRESIÓN

Afirmó que en su gestión nunca recibió presiones de sectores del poder ni adversarios políticos en cuanto el conocimiento de los casos de corrupción y fraudes bancarios.

Dijo que el presidente Mejía en ningún momento le trazó la línea a seguir.