El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, prohibió ayer todas las manifestaciones que exalten, promocionen, promuevan o reivindiquen la imagen de Rafael Leónidas Trujillo Molina.
La decisión fue adoptada mediante resolución y después de reconocer la validez de la Ley 5880-62 que instauró penas contra las alabanzas al régimen tiránico de Trujillo, la cual fue promulgada por el Presidente del Consejo de Estado, Rafael Filiberto Bonelly.
En la resolución, el procurador ordena al Ministerio Público que tome las medidas necesarias para evitar la exaltación de la figura del exdictador ajusticiado en 1961. Se mostró incompetente para determinar la anulación, derogación o modificación de la Ley 5880-62.