Directivos e integrantes de la Sociedad de Profesionales de las Telecomunicaciones (Prodetel) celebraron su quinto encuentro anual, en el que  fueron galardonados los miembros más sobresalientes de esa entidad en el plano profesional y se plantearon los objetivos para el 2006.

Como cada año, los miembros de Prodetel realizan su encuentro conjuntamente con la Asamblea General de la Sociedad en un pasadía donde los profesionales dominicanos de las telecomunicaciones  se unen en abrazos y remembranzas y comparten con operadores, autoridades, proveedores, invitados especiales y relacionados al mundo de las telecomunicaciones.

Dentro del marco de la celebración, los profesionales de las telecomunicaciones honran a los miembros de Prodetel que se han distinguido por su aporte a la formación de las nuevas generaciones de técnicos y administradores de la industria con mayor crecimiento sostenido en la República Dominicana.

Las palabras de apertura del acto estuvieron a cargo de Álvaro Nadal, presidente de la entidad, quien hizo una relación de las actividades de Prodetel durante el 2005 y los planes para el año que comienza.

José Rafael Vargas, presidente del Consejo de Directores del INDOTEL, reconoció la labor de ese organismo como soporte al desarrollo de las telecomunicaciones en el país y, exhortó a sus miembros, a dirigir entrenamiento especializado y actualizaciones para quienes actualmente se desempeñan en el campo de las telecomunicaciones y  aquellos que tendrán sobre sus hombros asegurar la inserción de República Dominicana en la sociedad de la información y el conocimiento.

Dentro de los profesionales premiados por la publicación de libros y artículos fueron distinguidos: Heiddekel Morrison, Mitsutero Nishio, Plinio Mesa y Héctor Castillo; por su labor de forjadores de nuevos valores, fueron galardonados Guillermo Capeans, Bartolo Cruz Grullón, Miguelina de Haché y Alejandro Novas. Como proveedor se distinguió a Pedro del Cuadro, presidente de PDC Telecom. Mientras que el máximo galardón del 2005 le correspondió a los esposos Daysi y José Espaillat, recordados por su ejemplo de laboriosidad, honestidad, cooperación y deferencia.