Hoy 
El profesor Gustavo Aurelio Vásquez Payán le confesó a un amigo el pasado martes 27 que había matado a Georgelina Yerussi Reyes Abreu, cuyo cadáver arrojó en un lugar desconocido, y que luego trató de suicidarse lanzándose al mar, pero que salió porque no pudo ahogarse, reveló la Policía.
Vásquez Payán hizo la revelación a Jesús Santiago de la Santísima Herasme Cuevas, la mañana del día 27, horas antes de que se encontrara el cadáver de la joven de 16 años de edad.
Herasme Cuevas, amigo del profesor, al ser interrogado en la Policía, manifestó que Vásquez Payán le dijo que le había quitado la vida a la joven, con sus propias manos, porque «le agradaba».
Sostuvo que después de concluida la conversación Vásquez Payán le manifestó que había encontrado una solución a su problema, en razón de que una persona, cuyo nombre no identificó, le vendería un arma de fuego por RD$6,000.
«Llamó una unidad de taxi, pidió que le enviaran una al colegio Santa Cecilia, ubicado a unos minutos de mi oficina, y me dijo que lo acompañara, solicitándome en el transcurso del camino que no conversara con nadie sobre eso y que si alguien preguntaba dijera que no lo había visto», dijo a la Policía Herasme Cuevas.
Asimismo, agregó que durante la conversación, Vásquez Payán le pidió prestado su celular y se comunicó en dos ocasiones con la abogada Joselín Altagracia Gutiérrez, a quien le solicitó ayuda porque tenía problemas, así como con su esposa Josefa María Rosario Polanco (Hilary).
Ayer la Fiscalía sometió a la justicia como cómplice de la muerte de Reyes Abreu a Marcos Vinicio Caamaño Pérez.
El expediente contra Caamaño Pérez, recluido en la cárcel del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, fue enviado a la jueza coordinadora de los Juzgados de Instrucción del Distrito Nacional, Doris Pujols, para que apodere a un tribunal que instruya la sumaria.
El joven está acusado de asesinato, complicidad, homicidio acompañado de otro crimen y asociación de malhechores, en violación a los artículos 59, 265, 296, 297, 298 y 304 del Código Penal.
En relación al caso, los padres de la menor, el magistrado Jorge Reyes y Altagracia de Jesús Abreu Núñez, presentaron querella contra Caamaño Pérez, al que acusan de complicidad con Gustavo Vásquez Payán, a quien consideran el asesino de su hija.
En tanto, Noberto Rondón, abogado de la defensa, informó que hoy intentará un recurso de hábeas corpus en favor de Caamaño Pérez, por entender que su prisión es irregular, así como por la falta de indicios.
El cadáver de la joven Reyes Abreu fue encontrado el 27 de enero pasado en horas de la noche, en la comunidad de Mata Naranjo, San Cristóbal.
Días después fue encontrado el cadáver del profesor Vásquez Payán. De acuerdo con el acto de acusación existen razones, elementos de juicios y argumentos suficientes que conducen a considerar que la actitud sospechosa de Caamaño Pérez de ocultar a un autor material de un crimen, así como ayudarlo guardándole bienes (el vehículo), retirando efectivo del cajero bancario, trasladándose de un lugar a otro y dándole facilidades de comunicaciones, «lo presentan, fuera de toda duda razonable, como cómplice en la ejecución del crimen».
Sin embargo, Caamaño Pérez niega rotundamente que sea cómplice en el homicidio.
De acuerdo con el expediente preparado por el ayudante fiscal Jorge Espejo, no es posible que Jesús Santiago, Josefa María y Joselín Altagracia se enteraran de que Vásquez Payán había cometido un homicidio, y que Caamaño Pérez diga que lo ignoraba, «salvo que haya actuado en complicidad y que quiera ocultar los hechos».
Sostiene el ayudante fiscal que ha sido imposible realizar un cotejo adecuado de los servicios medidos de distintos teléfonos, en virtud de que no disponen de tiempo suficiente para la investigación, por lo que anexaron la lista de llamadas al expediente para que sea el tribunal el que realice un registro minucioso.
