Programa rescate jóvenes  ha dado excelentes resultados

Programa rescate jóvenes  ha dado excelentes resultados

El sacerdote Luis Rosario, de la Pastoral Juvenil de la Iglesia Católica, dijo ayer que el programa piloto  de “rescatar jóvenes de la calle” iniciado hace 21 años por esa entidad, “ha dado excelentes resultados” porque ha rescatadado a decenas de jóvenes y adolescentes que dormían fuera de sus hogares, “a los que ha devuelto la dignidad.”

Recordó que el programa iniciado el 13 de abril de 1990, recogía en las calles a muchachos a los que la gente llamada palomos o huele cemento. La labor se desarrollaba lenta pero con pasos firmes conforme a las posibilidades de ese entonces.

El padre Rosario expresó que “es un programa de buena voluntad” que en promedio recogía o retiraba de las calles a 75 muchachos por año. “No es un programa oficial; es un programa de buena voluntad de la Pastoral Juvenil interesada en aportar su granito de arena”, destacó el padre Rosario.

Dijo que el programa se ha desarrollado en dos fases que son la de acogida y en la calle. Explicó que en la de acogida el programa ha tenido una media de 75 muchachos menores de edad cada año, y el de la calle con los que se inicia un programa de reeducación.

Afirmó que el programa “ha devuelto la vida y la dignidad a muchos jóvenes que de lo contrario se habrían perdido en la calle”.

En la conferencia de prensa el padre Rosario estuvo acompañado por Ángel María Acevedo, encargado de prensa de la Pastoral Juvenil y Rafael Gómez. El sacerdote dijo que cuando el programa nació en 1990 no se hallaba un nombre para ponérselo y se optó por ponerle “Yo También”.   

La clave

Objetivos

Entre los objetivos del programa se  hallan “liberar al muchacho de situación de la calle, porque es su primer enemigo”. Rosario declaró que “se trata también de ponerlo en condiciones de reintegrarse a un núcleo de vida mayor estabilidad”. Para albergar a los jóvenes de la calle dispone de una casa y la Casa de la Juventud. Ambos locales no son ni quieren ser internados, sino hogares transitorios, en los que los muchachos encuentren  un ambiente de familia.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas