De los 16,495 reclusos y reclusas que tienen las 34 cárceles dominicanas hay un importante número infectado por tuberculosis y el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), pero un estudio presentado ayer sólo se refiere a la necesidad de cambiar las conductas de los presos.
En torno a la situación, el director general de Prisiones, general Juan Alberto Cáceres Ureña, y los doctores William Hernández y Rosa Flores de la Dirección General de Infecciones de Transmisión Sexual y Sida (DIGECITSS), se refirieron a la situación.
De acuerdo con el estudio presentado ayer la actividad sexual en la población carcelaria es bastante alta si se toma en cuenta que el 57 por ciento de los presos declaró que tuvo relaciones sexuales en la prisión, mientras que 6.7 por ciento de las prisioneras que también tuvo relaciones sexuales en las cárceles.
La tercera parte de los presos declaró que tuvo más de 11 relaciones sexuales en los últimos tres meses, pero en su mayoría el condón o preservativo, brilló por su ausencia.
El estudio revela que las mujeres siguen siendo el grupo más vulnerable para la contraer la infección del VIH/SIDA en las prisiones, porque revelaron que nunca han recibido información sobre ese tipo de infecciones.
Se intentan crear programas educativos para lograr un cambio hacia la conducta de los reclusos, pero confiesan que todavía no se tiene un estudio de prevalencia.
Otras enfermedades que padecen los presos dominicanos son la escabiasis, piodermitis, gastroenteritis y las parasitosis por amebas y giardias, se informó.
El 49.22 por ciento de los presos está distribuido en las tres principales cárceles, La Victoria, Najayo y Rafey.
El 3.6% de los presos están distribuidos en las cárceles de la región fronteriza
El 96 por ciento de los reclusos son de sexo masculinos, 15,886, mientras que el 3.69% son femeninas, 609 mujeres.
Hay un total de 129 reclusos menores masculinos.
«La salud en las prisiones es a menudo olvidada o considerada de baja prioridad en los paises en via de desarrollo», sostiene un estudio.
«La mayoría de los reclusos tiene su salud en una condición de amenaza, pobreza, conflicto, discriminación y desinterés», sostiene la versión de expertos consultados por HOY.
Uno de los principales problemas que favorecen el empeoramiento de la situación de salud de los prisioneros en el país son los altos niveles de sobrepoblacion y hacinamiento.
El estudio presentado ayer asegura que en las cárceles dominicanas faltan condones, información, pero hay hacinamiento, insalubridad y los presos se colocan tatuajes sin criterios, lo que produce problemas de salud.
RECOMENDACIONES
los expertos han recomendado a las autoridades que se haga un estudio de prevalencia de SIDA en las prisiones, pero también que se aíslen los enfermo y se entregue medicamentos a los que los necesiten.
También solicitan que se mejoren las condiciones de vida de los reclusos: alimentacion, higiene, espacio, capacitación para la reinsercion y educacion.