Los inversores están multiplicando las apuestas a los bonos de empresas con los plazos de vencimiento más largos, en tanto los gerentes de cartera de Schroders Plc y los estrategas de JPMorgan Chase Co. pronostican que crecerá la demanda de la deuda que sufrió las peores pérdidas en 2013.
Los debentures de compañías con vencimiento en quince años o más rindieron 3,1% este año, 2,8 puntos porcentuales más que los pagarés con vencimiento en uno a tres años, muestran los datos de índices de Bank of America Merrill Lynch. Los estrategas de JPMorgan bajo la dirección de Eric Beinstein dicen que los pagarés conocidos como bonos largos están en condiciones de tener un desempeño superior al mercado hasta fin de año en tanto los fondos de pensiones y las compañías de seguros de vida vuelcan miles de millones de dólares a los títulos valores.
Al comprar deuda que suele ser la que más pierde cuando suben los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense, los inversores muestran confianza en que las inversiones de renta fija podrán soportar la reducción gradual del apoyo que durante cinco años la Reserva Federal dio al mercado. Aunque la mayor parte de los economistas pronostican que las tasas de los préstamos subirán este año, DoubleLine Capital LP y HSBC Holdings Plc sostienen que bajarán por la preocupación de que la economía no esté creciendo a la velocidad esperada.
“Podríamos ver una enorme cantidad de flujos hacia los activos de renta fija de más largo plazo de vencimiento”, señaló Neil Sutherland, gerente de cartera de Schroders en Nueva York, firma que administra US$415.000 millones de activos en todo el mundo. “Parece haber un consenso de que los flujos irán de la renta fija a las acciones; nosotros pensamos que ocurrirá lo contrario”.
Asegurarse rendimiento. Las aseguradoras de pensiones y de vida que necesitan reinvertir parte de las ganancias de las acciones obtenidas el año pasado luego de un aumento del 27,5% en el Índice MSCI World este año pueden canalizar alrededor de US$50.000 millones hacia los bonos de empresas, con preferencia por los títulos de más largo plazo, según Stephen Antczak, responsable de estrategia de crédito estadounidense de Citigroup Inc. Buscan asegurarse rendimientos que alcanzaron el nivel más alto en dos años, de 5,56% el año pasado, con los pagarés de vencimiento en quince años o más, muestran los datos de los índices de Bank of America Merrill Lynch.
Los rendimientos de los pagarés retrocedieron 0,4 puntos porcentuales desde entonces, a 5,13%, por la creciente preocupación de que las turbulencias de los países emergentes, de Argentina a China y Turquía, afecten la recuperación económica mundial.
Mientras que los economistas encuestados por Bloomberg esperan que los rendimientos de los bonos del Tesoro a diez años suban a 3,4 por ciento para fin de año, Steven Major y Lawrence Dyer, estrategas de HSBC, pronostican que caerán de 2,7 por ciento a 2,1% para el tercer trimestre, de acuerdo con un informe del 5 de febrero. El máximo responsable ejecutivo de DoubleLine, Jeffrey Gundlach, también vaticina que los rendimientos bajarán en 2014.
“El mercado de los bonos del Tesoro en su totalidad se ve beneficiado por las turbulencias de los mercados emergentes”, apuntó Antczak de Citigroup.