ADALBERTO DE LA ROSA
a.rosa@hoy.com.do
El ingeniero agrónomo Manuel de Jesús Amézquita, ex-secretario de Agricultura, propuso ayer la conversión del Banco Agrícola en una entidad que rija la política agropecuaria general, como lo hace el Banco Central con el manejo fiscal y monetario, a fin de lograr el relanzamiento del sector mediante una producción ampliada y sostenible.

El también productor avícola y agrícola de La Vega, entiende que la situación de carestía de alimentos en el mundo hace propicio el momento para relanzar la agropecuaria y convertir la crisis internacional  en oportunidades nacionales para el sector.

Consideró que para lograrlo se precisa de un reacomodamiento de la actual estructura, de la conducta productiva y desempeño de la agropecuaria ante los desafíos de la apertura comercial, la demanda interna de alimentos por parte de los dominicanos, los haitianos residentes y no residentes, los turistas y con la visión de generar empleos y divisas.

Indicó que hay que retomar el crédito administrativo que permita rehabilitar a los pequeños y medianos productores que no son sujetos de crédito bancario, pero que juegan un papel importante  en la producción de alimentos. Además impulsar un fondo de garantía que permita a la banca privada incursionar en el sector agropecuario haciendo negocio como cualquier otra actividad económica.

Opinó que el sector privado debe jugar un papel más protagónico, ante las transformaciones que experimenta el mundo, y que impacta en las estructuras económicas, políticas y sociales del país, para evolucionar  y cambiar el concepto tradicional  del “productor agropecuario al de empresario agropecuario”. 

A su juicio la combinación del sector privado y el Estado permitiría diseñar planes estratégicos y operativos que se traducirían  en ventajas competitivas de sus empresas y beneficios a los consumidores finales.

 “Nuestra agricultura tiene que pasar de sedentaria y conformista a competitiva y dinámica porque la competitividad  es la llave de entrada a los mercados y para ello hay que tener una producción ampliada que incluya complejos agroindustriales que repercutan en la generación de ingresos,  vía el incremento de las exportaciones y el ahorro de divisas”, dijo.

Expresó que hay que vincular la producción con los mercados y “no preguntarse: ¿cuánto producir?, sino ¿qué quieren los consumidores?”Estimó que se deben revisar estrategias sobre programas, políticas y planes institucionales que pasaron a ser obsoletas ante el enfoque de un agricultura ampliada.

Para Amézquita una de las acciones más urgentes es la inversión en investigación y desarrollo de nuevas tecnologías, que desarrolle el cultivo de semillas de alto rendimiento en invernaderos, además de ampliar y modernizar  el parque  de maquinarias para que en vez de utilizarse 26 tractores  por cada 100  kilómetros de tierra arable, sean  120 las maquinarias por cada 100 kilómetros.

Consideró que debe reevaluarse la Reforma Agraria para que, además de utilizar nuevas tecnologías en los procesos de producción, contemple la capacitación gerencial. Propuso reformular la parte  curricular de las universidades y escuelas de agronomía para que los egresados salgan sintonizados  con el mundo globalizado.

  Enfatizó que el país requiere de nuevas ofertas de maestrías y diplomados en comercio agrícola internacional.

El protagonista

Manuel de Jesús Amézquita

Secretario de Agricultura durante dos períodos.

Ex director de Inespre.

Nació el 28 de octubre de 1950 en La Vega. Es egresado de la Escuela Agrícola Salesiana de La Vega (1968-1972). Hizo una maestría “Master Business Administration”,  Universidad  Quebec-Apec. Postgrado en Banca y Financiamiento de Desarrollo y un diplomado en Formulación y Evaluación de Proyectos. Ha sido asesor agrícola del Poder Ejecutivo y actualmente  es consultor privado.

pieManuel de Jesús Amézquita Candelier tuvo una participación activa durante los gobiernos de Balaguer. Hoy/ Jorge González.