SANTIAGO.- El  presidente del  Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en esta provincia favoreció que en la próxima reforma constitucional se reduzca el número de diputados y consideró excesiva la cantidad de representantes legislativos en sus demarcaciones.

De igual forma, Ulises Rodríguez  consideró que la inversión que realiza el gobierno en Santiago es insuficiente en relación con los aportes fiscales al Estado y la destinación de financiamientos al desarrollo de los empresarios cibaeños.

El también  diputado al Congreso Nacional entiende que  con un menor número de  miembros de la cámara baja puede hacerse una adecuada labor, por lo que el número actual representa un  exceso y una carga para el Estado dominicano. 

Afirmó que su propuesta puede parecer cuesta arriba, por tratarse de un diputado, pero insistió en que es tan sólo un planteamiento  responsable sustentado en la realidad de los hechos y las necesidades del país. 

Señaló que el trabajo e un diputado y  de un político, como de cualquier hombre público debe estar revertido de la mayor responsabilidad  porque contrario a lo que otros piensan, el pueblo observa y está atento a las actitudes y comportamiento de cada uno.

 En tal sentido plantea que en el actual proyecto de Reforma Constitucional que se elabora se debe contemplar la reducción del número de  diputados por habitantes, que en la actualidad es de Uno por cada  50 mil habitantes o fracción superior a los 25 mil.

 Sostiene que debido al crecimiento demográfico es imposible sostener ese porcentaje, porque el número de diputados ha ido en aumento y sin embargo, esa misma labor, tal vez más eficiente puede hacerse con un mayor número de diputados. 

Explicó que el número de diputado no es, de ninguna manera,  garantía de transparencia ni de que los de temas serán abordados con mayor responsabilidad y rigurosidad como se requiere. 

El también presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en Santiago sostiene que  de esa forma, el estado se ahorraría muchos recursos que pueden ser destinados a otras áreas prioritarias, como la educación y la salud y que incluso la misma Cámara de Diputados podría tener un manejo más adecuado en términos de espacio físico  y eficiencia administrativa. 

Rechazó que sus planteamientos puedan molestar a sus colegas, precisando que la garantía de cada uno descansa en el trabajo que desarrolle a favor de sus comunidades y sus respectivos partidos en la defensa de los intereses para los que fueron electos tanto dentro como fuera del Congreso Nacional. 

Señaló que cuando hace un planteamiento hace en función del interés  general y recordó que muchos meses de la debacle de zona franca había advertido al Gobierno de lo que estaba ocurriendo allí y lo que inevitablemente pasaría sino se actuaba con tiempo. 

Sostiene que por si el gobierno no actuó es porque tal vez no previeron las dimensiones del  problema  o del impacto que causaría en una ciudad como Santiago donde el sector de zona franca ha sido una pujante  industria al servicio del desarrollo. 

Precisó que zona franca no sólo garantizaba  decenas de miles de empleos directos a los trabajadores, sino que daba origen a un comercio informal y dinamiza el resto de la economía local y regional, aportando millones de divisas al país.