Tania Hidalgo 
Participaron autoridades locales y expresiones culturales del legado africano.
Con motivo a la conmemoración del 225 aniversario de la rebelión negra de Boca de Nigua, el gestor cultural Darío Solano propuso que los procesos de resistencia a la esclavitud y la trata trasatlántica sean incorporados al estudio de la historia dominicana, al indicar que esta ausencia atenta contra la estabilidad de la identidad del pueblo.
Afirma, además, que esos vacíos pedagógicos han generado conflictos en la conformación de las culturas de la población.
El coordinador de la Fundación La Negreta hizo el planteamiento durante un acto de recordación de la resistencia del régimen de la esclavitud ocurrido el 30 de octubre del 1796.
Refirió que la rebelión negra de Boca de Nigua ha sido el testimonio más álgido de la lucha de los oprimidos africanos esclavizados en el Santo Domingo español, dado que es la primera revuelta en la que se plantea la abolición de la esclavitud.
Los actos, que se realizaron en las instalaciones coloniales del ingenio azucarero de Nigua, fueron organizados por la Fundación Cultural La Negreta, y contaron con la participación del Ministerio de Cultura, el Cabildo de Nigua, la junta de vecinos de Boca de Nigua y otras entidades.
Los organizadores llaman la atención de los ministerios de Educación y de Cultura para que se integre al currículo de la educación el pasado colonial con objetividad, haciendo énfasis en el estudio de la esclavitud. “También exigimos que esas dependencias elaboren una agenda interinstitucional para conmemorar los 500 años de la primera rebelión negra del Nuevo Mundo, llevado cabo por miembros de la etnia wolof procedente de Senegambia, en el ingenio de Diego Colón, el cual estuvo ubicado en la ribera del río Nigua, en diciembre del 1521”, acotaron.
Lamentan la discriminación racial, racismo y xenofobia y estiman necesario una convivencia social en el marco de la diversidad cultural y el diálogo intercultural de los pueblos.
