Aspirantes a miembros de la Cámara de Cuentas afirman que ni contratando a todos los auditores internos de la República Dominicana se podrá realizar auditorías anuales de todas las instituciones públicas, menos en tres meses, debido a que el sistema está obsoleto y a que no existen controles internos.
La Comisión evaluadora y que preside el diputado Rogelio Genao Lanza, concluyó ayer las dos primeras semanas de entrevistas superando los 200 participantes que buscan un puesto en el Pleno de la Cámara de Cuentas.
Los entrevistados ayer fueron: Héctor Leonardo Rafael Rojas Canaán, Bienvenido Ferreras Segura, Nilo Vinicio de la Rosa Jourdain, Jelen Margarita Lugo Santana, Soraida Antonia García García, Marcelino Silverio Vásquez, Élvin Rafael Ramón Araujo, Elizabeth Rodríguez de Pérez, Celeste Argentina Martínez de Ramírez, Henry Rafael Tejera Díaz, Faustino Antonio Reyes Espinal, Ulises Santana Santana, Francisco González Genao, Víctor Antonio Peguero Cotes, Juan Manuel Vidal Ruiz.
Asimismo, a: Miguel Andrés Gil Díaz, Ángel Manuel Cruz Aristy, Nelson Mayobanex Soler Méndez, Wellington Bienvenido Salcedo Cassó, Saulo Sierra Valenzuela, y Máximo Tulio Tavares Naut, Maribel González Martínez de Frómeta, Rodolfo Valentino Martínez Lovera, Melanio Figueroa, Ana María Romero Medina, Raquel Santana Berroa, Julio César Gómez Altamirano, José Arturo Mejía Morató, Josefina del Carmen Holguín García y Héctor Francisco Inoa Rosa.
Vidal Ruiz. El contador pública autorizado, con post grado en impuestos y abogado, consideró que el accionar de la Cámara de Cuentas es pasivo y sin herramientas, que falta una entidad similar, con autonomía administrativa y presupuestas, que tenga como función principal la contabilidad gubernamental y sobre todo, el sistema de información integrado. Favorece reducirle el presupuesto.
Entiende obsoleto hacer auditorías y lamenta que el Gobierno quiera modificar la Ley 10-04, que rige la Cámara de Cuentas. “Esa no es la solución, tienen que ser una solución horizontal, derogando leyes como la 137-14, que es una aberración”.
Critica que no exista contabilidad por partida, estado financiero y que todo “esté supeditado a que un ministro director altere la información”.