En el desarrollo de toda campaña electoral la población espera escuchar de sus candidatos la forma como serán abordados los principales problemas de la nación. A pesar de que la crisis eléctrica estuvo fuera de los temas que más preocupaban a los dominicanos durante el año 2009 de acuerdo a informes de confiables firmas encuestadoras, estudios recientes colocan la problemática del sector eléctrico entre una de las cuatro áreas que más preocupan a los dominicanos. Y ciertamente no es para menos, pues persiste una demanda de recursos del presupuesto general de la nación, superior a los mil millones de dólares al año para subsidiar la ineficiencia de un sector que necesita transformaciones valientes.

Es precisamente en ese estado de cosas que el candidato presidencial del PLD da a conocer parte de lo que sería la política energética de su futuro gobierno. En su intervención ante la Cámara Americana de Comercio, Danilo Medina exhibió un alto conocimiento del sector electricidad, de sus indicadores, pero sobre todo, dio a conocer medidas que serán tomadas para poner fin a la triste historia eléctrica del país. Contrario a lo que algunos neófitos en la materia han predicado, responsabilizando de la crisis al humilde consumidor final y calificándolo de forma reiterada  como moroso, Danilo va a la raíz del problema.

En tal sentido propone la instalación de nuevas plantas de generación, que funcionen en base a carbón mineral o gas natural y que serán instaladas por el Estado si el sector privado no quiere hacerlo, independientemente de las posiciones que adopten organismos internacionales. Esta es una posición valiente, que de haberse tomado en el  2005 cuando fue propuesta por el ex vicepresidente ejecutivo de la CDEEE, Rhadamés Segura, República Dominicana se hubiera ahorrado más de cinco mil millones de dólares y esa crisis fuera tema del pasado.