Los expertos coinciden en que ningún plan contra la delincuencia resultará efectivo mientras no consiga involucrar a la ciudadanía en su aplicación, lo que no ocurre con el anunciado el pasado viernes en el Palacio Nacional, que entre otras medidas volverá a enviar a las calles a los militares y sus intimidantes armas largas a labores de patrullaje junto a miembros de la Policía, las famosas patrullas mixtas que tanta controversia han provocado. Partiendo de este principio que, dicho sea de pasada, nunca ha sido tomado en cuenta por los responsables de garantizar la seguridad pública de este país, el Comité Para la Defensa de los Derechos Barriales (COPADEBA) propone un par de ideas que apuntan, precisamente, a lograr ese involucramiento de la población para enfrentar un problema que, como ya sabemos, no se resuelve con tan solo patrullaje y represión. Los directivos de COPADEBA, que denunciaron el incremento alarmante de robos, atracos y violencia en sentido general en el Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo en los últimos meses, proponen que en cada barrio se forme un Comité de Cuadras para la Seguridad Vecinal (que también puede ser por manzanas o por edificios) para realizar labores de vigilancia. También, que las comunidades tengan la oportunidad de depurar y designar a los policías asignados a los destacamentos como una forma de evitar que se asocien con los delincuentes y traficantes de drogas, una alianza perversa que ha convertido en un infierno la vida en muchos de nuestros barrios. Desde luego, son tan solo ideas que nuestras autoridades no están obligadas a adoptar pero sí a tomar en cuenta, y la razón es tan sencilla como evidente: el fracaso de todas las medidas anunciadas hasta ahora contra la criminalidad y la plaga incontrolable de la delincuencia.