Propuestas para los organizadores de Juegos

Propuestas para los organizadores de Juegos

El pebetero que ilumino los XII Juegos Centroamericanos y del Caribe en 1974, en Santo Domingo.

Propuestas al Comité Permanente del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano y al Comité Organizador de los XXV Juegos Centroamericanos y del Caribe 2026.

En un par de años se cumplirán cincuenta años de la celebración de los XII Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe , los “Docejuegos” que en 1974 constituyeron un verdadero acontecimiento en la historia del deporte en la República Dominicana.

Para 2026 se presentarán por tercera vez en el país, unos juegos como estos, en la XXV edición de este certamen del deporte regional.

Los XII Juegos Centroamericanos y del Caribe fueron celebrados en la ciudad capital del 27 de febrero al 13 de marzo.

Participaron 2,052 atletas en 18 deportes (atletismo, baloncesto, béisbol, boxeo, ciclismo, clavados, fútbol, gimnasia artística, judo, pesas, lucha olímpica, natación, polo acuático, softbol, tenis, tiro deportivo, vela y voleibol) y el país presentó a esos juegos 203 deportistas.

Fue el primer gran compromiso del deporte dominicano, asumido en su momento por el Gobierno de Joaquín Balaguer (*) con el nacimiento del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, y con Juan Ulises García Saleta (f) como su gran promotor.

Era la primera vez que se construían grandes y modernas instalaciones deportivas en el país que ganaría una sola medalla de oro en la justa deportiva con Amauris Cordero en levantamiento de pesas, lo que constituyó un gran regocijo nacional.

Sin dudas la celebración de esos juegos constituyó una transformación para bien del deporte dominicano y de ahí en adelante hablar del antes y un después de esos juegos.

Pasaríamos horas escribiendo de héroes anónimos de esos juegos, Max Reynoso con su lema “Compromiso de Todos”, y su magistral equipo de prensa y Propaganda, de Bebesito Martínez Brea, el hombre de Balaguer y presidente del Comité Organizador; de Virgilio Travieso director técnico con su inolvidable mano derecha Enrique Ripley Marín; de Marcos Jiménez, encargado de la transportación, y quien nos facilitara un helicóptero con Marcos Rodríguez como piloto, para las fotos aéreas de la inauguración (no había drones en la época).

Horacito Veras, vicepresidente del Comité y director de Deportes del Gobierno; Darío Canó como director administrativo; Chito Asmar, administrador de la Villa, y Carlos Piantini en los eventos culturales y artísticos. Sin dudas los Docejuegos sacudieron el espíritu nacional y marcaron el inicio en el país.