TOM BRAITHWAITE
Washington. a suprema protectora del consumidor financiero en el gobierno de Estados Unidos, Elizabeth Warren,  está trabajando en un acuerdo con los bancos que conduciría a productos más transparentes, pero que al mismo tiempo podría significar el fin de las cuentas bancarias gratuitas.

Lo que Warren está buscando, a través de la transparencia antes que de la prohibición, es censurar los costos “ocultos” de la industria, tales como los cargos por sobregiro, los cuales representan por encima de un tercio de los ingresos centrales para algunos bancos.

Ella está presionando para que la industria adopte un formulario hipotecario más corto y un estado de cuenta más claro de las tarjetas de crédito.

“La industria necesita existir”, ella dijo. “Necesita cubrir los costos y tener un margen de beneficios. Pero la competencia asegurará que los consumidores no se engañen por pensar que algunas cosas son gratis, sólo para descubrir que ellos están pagando un alto precio en algún otro lado.

 “Yo rechazo la noción de que los costos sean más altos, pero es cierto que serán más claros”.

Warren fue nombrada por el presidente Barack Obama, para organizar el Buró de Protección al Consumidor Financiero (CFPB, por sus siglas en inglés) entre la amplia oposición de los republicanos que temen que ella se empeñe en hacer cojear la industria con las regulaciones.

Los ejecutivos bancarios dicen que ellos han sido sorprendidos con la atractiva ofensa lanzada por Warren, profesora de la facultad de derecho de Harvard, en sus primeras semanas en el puesto.

Ella ha sostenido reuniones con luminarias de Wall Street como Jamie Dimon de JPMorgan Chase y Vikram Pandit de Citigroup, como también banqueros comunitarios y defensores del consumidor.

 “Su prioridad es hacer que la declaración financiera del consumidor y los acuerdos sean comprensibles para la mayoría de los consumidores”, dijo Michael Calhoun, presidente del Centro para Financiamiento Responsable. “En este momento, hay contratos de adhesión ininteligibles”.

Warren dijo que la respuesta hasta el momento: “Ha sido de importancia. Hay quienes dicen ‘Sí, necesitamos cambios sustanciales y esta es la dirección correcta’. Hay quienes están probablemente apoyando la moción sólo de forma aparente, y hay otros que están tratando de hacer justo eso”.

Algunos observadores piensan que ella está tratando de crear consenso detrás de nuevos estándares de transparencia debido a que es improbable que ella sea confirmada como la primera jefa a tiempo completo del CFPB debido a la continua oposición republicana, y por lo tanto, sólo tiene unos pocos meses para estampar su sello en la agencia.

Algunos en la industria dicen que la mucha presencia del CFPB y la presión para cambiar la declaración no son bienvenidas, justo después de las iniciativas sucesivas de los gobiernos para revisar los formularios hipotecarios y prevenir que los costos por los sobregiros no sean acordados previamente por los consumidores. Los críticos dicen que la incertidumbre sobre las cambiantes normativas está ahogando la innovación y frenando el suministro del crédito.

Si la industria elige resistirse o “apoyar sólo aparentemente” a Warren, queda poco claro si los nuevos términos serán impuestos sobre ellos.

El CFPB, el cual fue creado por las reformas financieras Dodd-Frank, adquirió sus poderes totales en julio. Warren podría continuar por un tiempo en un rol presidencial de facto, pero ultimadamente requeriría la confirmación del Senado. Ciertamente, ella no está ofreciendo desplegar su habilidad de prohibir los productos financieros. “Hay mucho más que no podemos hacer concibiendo costos y riesgos más claros. Pienso que deberíamos enfocarnos en esos asuntos primero”, ella dice.

El resultado puede ser el mismo sólo que bajo un presidente diferente. El otro contendiente principal para el puesto es Michael Barr, un alto oficial de la Tesorería que delineó los poderes de la agencia. Él está regresando a su anterior empleo de catedrático en la Universidad de Michigan, pero ya está apuntando hacia el retorno a Washington.

 “Pienso que lo que hay que recordar es que la evaluación gratuita de las cuentas corrientes no son realmente gratis y que al final se paga de una forma o de otra”, él dijo. “En el caso de la evaluación gratis, primeramente es guiada por los insuficientes costos de sobregiro y de financiamiento.

Los consumidores pagan sin importar nada más.

 “Los estados de cuenta en el pasado ha sido primeramente escritos desde la perspectiva de proteger el riesgo de litigio de la empresa. Y yo pienso que un enfoque que esté basado en preguntar ‘¿cuál sería la forma más efectiva de comunicarse con los seres humanos?’ sería un cambio bienvenido.

Las claves

1.  Acuerdo con bancos

En EU se está trabajando en un acuerdo con los bancos que conduciría a productos más transparentes.

2.  Fin cuentas gratuitas

 Pero que al mismo tiempo podría significar el fin de las cuentas bancarias gratuitas.

3.  La industria

Elizabeth Warren está presionando para que la industria adopte un formulario hipotecario más corto y un estado de cuenta más claro de las tarjetas de crédito.

Ministros finanzas euro agilizan régimen manejo crisis  deuda

Ben Hall

París  

Los ministros financieros de la eurozona están poniendo los toques finales a un régimen para manejar las crisis de deuda futuras involucrando a los acreedores privados, pero los oficiales franceses dicen que es altamente improbable que un gobierno jamás sea presionado para reestructurar su deuda.

“Los mercados lo han hecho mal”, dijo un oficial. “La insolvencia no es solamente políticamente aceptable”.

En un convenio más adelante suscrito por otros gobiernos de la eurozona, Francia y Alemania acordaron el 28 de noviembre fijar un mecanismo permanente de estabilidad europea que consta de dos etapas. Los países con problemas de liquidez conseguirán acceso a ayuda de emergencia como lo hacen ahora con los €440 millardos de la facilidad de estabilización financiera europea (EFSE, por sus siglas en inglés).

Un miembro de la eurozona que más tarde sea declarado insolvente tendrá que reestructurar su deuda. Mientras Berlín presenta el acuerdo como un avance que aseguraría que los tenedores de bonos compartan el costo de financiamiento para los gobiernos indisciplinados, París tuvo una opinión diferente.

Los oficiales franceses no ven esto como algo realmente nuevo. “Hemos creado la alternativa de la ausencia de originalidad”, dijo un alto asesor de Elysée.

 A medida que los mercados se enfocan en la naturaleza de la participación del sector privado en la potencial reestructuración de deuda, Elysée cree que el logro fue la extensión de la EFSF.  En mayo, Francia y otros gobiernos de la eurozona lucharon por conseguir que Berlín acordara una facilidad de rescate temporal. Seis meses después Alemania acordó hacerlo permanente. Ahora la responsabilidad está en asegurar que el fondo sea lo suficientemente grande para contener la crisis.

En cuanto a la reestructuración de deuda, los oficiales franceses dicen que esto contradice los procedimientos del FMI para lidiar con la crisis de deuda soberana.

Esta opinión es compartida por Jean-Claude Trichet, presidente del Banco Central Europeo. En París, el viernes pasado, Trichet dijo: “Lo que yo asumo de esta declaración del 28 de noviembre y lo que es esencial a mi entender, es que los gobiernos europeos están poniendo muy en claro que ellos no están introduciendo una doctrina diferente.

“En el caso de los paquetes de ajuste europeos con el apoyo del FMI que pueden ser desencadenados en Europa, no hay una doctrina muy diferente de la doctrina internacional”.

VERSIÓN AL ESPAÑOL DE ROSANNA CAPELLA