POR LLENNIS JIMÉNEZ
La Fiscalía del Distrito Nacional intenta tener el control absoluto del parque del canódromo ubicado en el kilómetro 14 de la autopista Duarte, a donde son remolcados los vehículos incautados por violación a la Ley de Tránsito, para evitar que los agentes de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET) continúen maltratando a los conductores.
La magistrada coordinadora de los fiscalizadores del Tribunal Especial de Tránsito del Distrito Nacional y de la Casa del Conductor, Bertha Susana Byas de Espertín, anunció ayer que las autoridades judiciales preparan una oficina para instalar un fiscalizador permanente en el recinto del canódromo que garantice el respeto de los derechos de los ciudadanos.
La propia fiscalizadora de tránsito fue objeto de desconsideración en el canódromo, por parte un agente de AMET que no le brindó el trato que ameritaba en una visita que realizó al lugar.
Al canódromo son llevados los vehículos retenidos y sus propietarios regresan a recuperarlos, luego que han corregido la irregularidad que produjo la infracción. Llueven las quejas de los conductores, por las vicisitudes que pasan para que les devuelvan sus unidades y por el trato que les dan los agentes.
Asimismo, en la mayoría de los conductores de tránsito, sobre todo, en los del transporte público, persiste la idea de que los agentes de AMET tienen la obligación de reportarles a sus superiores cien infracciones de tránsito aplicadas por día.
Manuel de la Cruz Merán, quien ayer pagaba una multa que le impuso un agente de AMET por alegadamente piratear transportar pasajeros sin estar autorizado por un sindicato, ni tener rotulación de ese organismo gubernamental, denunció que el policía de tránsito que lo detuvo y quién firmó el acta que le fue levantada, identificado con los apellidos Ramírez Navarro, le dijo que con esa multa, completaba la número cien.
Sostuvo que el agente le puso una multa el pasado 19 de febrero a eso de las 3:00 de la tarde en la calle José Martí, no reparó en su constante insistencia de que quienes iban en su carro eran su mujer y su cuñado.
Manifestó que por este inconveniente, en el que también fue acusado de obstruir el tránsito, su vehículo placa A352349, ayer tenía seis días de haber sido incautado por el agente.
Ramón Tejada, conductor de carro público, pagaba este martes la contravención que le puso un AMET por salirse de la ruta que le fue asignada, empero, se defendió diciendo que realizaba una carrera a clientes que le suelen requerir el servicio.
Criticó que no se le permitió presentarse ante el juez para comprobar que no era conducir pirata y que, por el contrario, solo tenía derecho a pagar sin ser escuchado en audiencia.
Señaló que los conductores continúan teniendo una serie de inconvenientes para pagar las multas, porque además de ir a la estafeta de pago, tienen que dirigirse al destacamento que se encuentra en la parte lateral del edificio y luego subir a la cuarta planta a recuperar la licencia o la orden policial que emite la administración.
A las vicisitudes que expresan estos conductores, la coordinadora de los fiscalizadores responde garantizando que modernizan el Tribunal de Tránsito.
Precisó que en el canódromo además del fiscalizador de tránsito, habrá un módulo computarizado para que los conductores puedan pagar las multas sin necesidad de tener que dirigirse a la sede de AMET, lo que de por sí, es un ahorro de tiempo y evita la molestia de tener que presentarse a más de una entidad para que se le entregue el vehículo.