PARIS (AP).- Miles de personas, principalmente mujeres que gritaban «­El velo, mi opción!», marcharon el domingo por las calles de París para manifestar su oposición a una propuesta de ley que prohibiría a las musulmanas lucir sus pañuelos en los colegios públicos y probablemente también en sus trabajos.

La protesta, un llanto de angustia de uno de los sectores menos escuchados de la sociedad francesa, fue la primera en París desde que el presidente Jacques Chirac anunció la semana pasada que los pañuelos que utilizan las mujeres islámicas para cubrir sus cabezas y otros símbolos religiosos _como los gorros judíos y los crucifijos grandes_ deberían ser prohibidos en los colegios para proteger la separación francesa entre religión y estado.

Instó al Congreso a que apruebe a tiempo la ley para implementarla en el año escolar 2004-2005 que comienza en septiembre próximo.

Chirac propuso también otorgarle a las empresas el derecho de decidir si los empleados pueden lucir en el trabajo símbolos religiosos, y dijo que la ley debería impedir que los pacientes se nieguen a ser atendidos por doctores del sexo opuesto, algo que hacen las mujeres musulmanas.

La policía de París dijo que unas 3.000 personas marcharon por las calles. Más de la mitad de ellas mujeres y niñas que cubrían sus cabezas con pañuelos.

Los manifestantes denunciaron que las medidas propuestas por Chirac estigmatizarán a los musulmanes y harán nulos los valores fundamentales franceses.

«Libertad, igualdad y fraternidad, pero no para las mujeres que desean usar el velo», se quejó Fatima Boicha, ama de casa y madre de dos hijos que reside en Mantes-la-Jolie, al oeste de París, su cabeza y nuca cubiertas por un pañuelo marrón.

«El estado francés quiere que nos sometamos, quiere decirnos qué vestir y qué no vestir», agregó. «Ninguna de las mujeres que están aquí se sacarán sus velos».

Los manifestantes cantaron la Marsellesa, himno de la revolución francesa, y gritaban «Querida Francia, ¨dónde está mi libertad?».

Algunos mostraban sus tarjetas de identificación o cargaban fotocopias de sus tarjetas de votación para exhibir su nacionalidad francesa.

«Orgullosos de ser musulmanes», leía un cartel. «Yo voto», rezaba otro.

Los manifestantes dijeron que es la primera vez que las mujeres musulmanas protestan de manera conjunta en la capital francesa. La prensa indicó que otras protestas similares se realizaron en Estrasburgo, al este de Francia, y Avignon, al sur.