Manama, (EFE).- Diferentes localidades chiíes de Baréin fueron hoy escenario de protestas dominadas por la indignación tras la muerte de una mujer minusválida el viernes en medio de los disturbios que sufrió su aldea.

La mujer, identificada como Zainab al Yuma, se encontraba en su cama cuando comenzaron enfrentamientos entre agentes antidisturbios y manifestantes en la localidad de Sitra, al sur de Manama, informaron sus familiares.

 Según testimonios de los habitantes de ese pueblo, la policía disparó grandes cantidades de gas lacrimógeno directamente dentro de los hogares, como un castigo colectivo.

Los parientes de Al Yuma aseguraron a medios locales que el gas lanzado por la Policía se filtró en el sistema de aire acondicionado de la casa de la mujer, de 46 años y madre de dos hijos, lo que le causó la asfixia. Sin embargo, las autoridades afirmaron en un comunicado difundido hoy que la muerte de la discapacitada tuvo un origen natural.

El principal partido de la oposición chií, «Al Wefaq», respaldó la versión de la familia de Al Yuma, y denunció que este tipo de acciones se repiten habitualmente sin que sean castigadas.

El funeral hoy de la mujer derivó en graves enfrentamientos entre miles de personas que participaban en el acto y las fuerzas de seguridad.

 Los manifestantes cargaron contra el gobierno, pidiendo su renuncia, y contra los partidos de la oposición que han accedido a participar en el diálogo nacional convocado desde comienzos de julio por el rey de Baréin, jeque Hamad bin Isa al Jalifa.

 La cifra total de muertos en la revuelta bareiní desde el 14 de febrero asciende a 30, mientras que cientos permanecen detenidos y más de 2.000 personas han sido despedidas de su trabajo por participar en las protestas. EFE