El Estado asumiría los costos para que todos los centros médicos, públicos y privados del país, tengan que brindarle asistencia a los pacientes en estado de emergencia en las primeras 24 horas, cuando se presenten por un accidente de tránsito o ante cualquier manifestación de una lesión o una repentina enfermedad.

Así lo plantea el proyecto de modificación de la Ley General de Salud, 42-01, del diputado Agustín Burgos, el cual dispone que del Impuesto Sobre la Renta se especialice un monto para asumir estos costos.

La Cámara de Diputados, reunida en sesión, envió la iniciativa a ser estudiada en la Comisión de Salud.

Aunque la Ley General de Salud obliga a las clínicas a socorrer al paciente en condiciones críticas, en la práctica no se cumple.

Por esto, Burgos, quien es médico de profesión, propone agregarle varios artículos a la Ley 42-01, para disponga que los ingresados en estado de emergencia a centros de salud públicos y privados reciban asistencia médica, sin que sus propietarios puedan dirigir al paciente en condiciones criticas para otro lugar, a menos que no tengan las especialidad requerida.

La peculiaridad del proyecto, afirma Burgos, consiste en que cuando un paciente sea llevado a una clínica que pueda estar a 500 metros del suceso, tanto la clínica como el médico que asista al enfermo sean pagados en base a un débito del impuesto sobre la renta. Su proyecto es que cada año, de los impuestos se saque el dinero para costear este servicio.

“El asunto ahora no es que el médico no quiere dar el servicio para una persona que llegue de emergencia o que la clínica no quiera asistirle, porque lo que ocurre es que las clínicas incurren en gastos de materiales, radiografías, sonografías, catéter, suero, y eso, las clínicas lo compran. Debemos entender que eso es un servicio”.

Señala que la primera hora después de un caso de emergencia es fundamental para la vida del paciente, ya que la asistencia oportuna es lo que va a marcar si vive o si muere.
En un accidente de tránsito, cita que las primeras horas definen si tiene hemorragia interna o externa; un shock hipovolémico, si tiene un órgano obstruido, como la lengua, que lo pueda asfixiar. Ante un infarto, lo urgente es quitar el dolor de pecho y antitrombótico.