Hoy 
MAURO CASTILLO
Al retornar al país a principio del año 1970, iniciamos nuestra carrera como Psicólogo Clínico e Infantil formado en el Instituto de Psicología «Henry Pieron» de la Sorbona, Universidad de París, que dirigía el gran Psicólogo Experimentalista Paul Fraisse, autor junto al Maestro de la Psicología Infantil suizo Jean Piaget del Tratado de Psicología Experimental compuesto por X Tomos, que abarcan todos los grandes temas de la Psicología Moderna y participaron además en su elaboración varios de los más prestigiosos Psicólogos Occidentales.
Estas circunstancias tan motivantes e inspirado además por la sapiencia de nuestros excelentes profesores, tales como René Zazzo, quien dirigía el Instituto de Psicopedagógico de París, Piere Pichot, Jefe de Servicio de la Clínica de Enfermos Mentales y del Encéfalo del Centro Hospitalario santa Ana, Facultad de Medicina Cochin Port Royal, nos facilitaron comenzar impartiendo cátedras en la Facultad de Humanidades de la UASD y orientando vocacionalmente a los jóvenes que tenían que pasar por el Departamento de Orientación Vocacional antes de ingresar a estudiar cualquiera de las carreras que en ese momento ofrecía Nuestra Alma Mater. Además nos incorporamos luego a la consulta hospitalaria en el Hospital Salvador B. Gautier del IDSS, así como a la labor de carácter privado donde han sido relevantes las demandas por los múltiples trastornos infantiles y de los adolescentes por dificultades de Conductas y del Aprendizaje, al igual que las crisis de Parejas, dado el grado de conciencia adquirido por los Matrimonios que están dispuestos a luchar cada vez más para no dejar destruir su familia al ser considerada la verdadera célula social donde se forman los valores morales imperecederos de nuestros hijos.
Más de 30 años después nos encontramos con que se ha presentado un inusitado interés por la Psicología y el Comportamiento de los envejecientes debido quizás al aumento significativo del promedio de años de vida que se está logrando en los diferentes grupos sociales de los distintos países ya sean los llamados desarrollados o en vía de desarrollo.
Por ejemplo, aquí en Francia, el promedio de vida se ha prolongado a 86 años para las mujeres y 85 años para los hombres en las últimas décadas.
Precisamente en el Centro Geriátrico donde hemos venido a tomar un entrenamiento (stage) sobe los trastornos Psicológicos más frecuentes en los sujetos envejecientes en el Hospital Central y Geriátrico de Tournan ubicado en las afueras de París auspiciada nuestra estadía por el Gobierno Francés, nos hemos encontrado con una población geriátrica que son pensionados o retirados por el Estado y otros que son pacientes internos por larga duración por la naturaleza de sus distintas enfermedades, es decir, es un centro tanto hospitalario como geriátrico.
La población total es en este momento de 130 sujetos, cuya mayoría está integrada por personas del sexo femenino con 77 mujeres, equivalentes a un 56% y 53 hombres, que equivale a un 44%. La edad promedio se mantiene estabilizada en 79 años con la existencia de casos extremos que han cumplido un siglo.
En nuestras observaciones que podíamos retener mientras dábamos apoyo Psicológico a esta amplia heterogénea población, es valioso señalar la marcada necesidad que manifestaban estos residentes geriátricos de encontrar un ser humano que les escuchara más allá de sus sufrimientos físicos y que dieran muestra de interesarse por ellos, por sus ideas, aun incoherentes, muchas veces, por su soledad y por lo más apreciado que es sentirse valorizado y poder salir momentáneamente de la irreversible depresión que tanto invade el estado físico y mental de la gran mayoría de nuestros envejecientes en su viaje sin retorno y que de manera general ninguno queremos aceptar por no seguir la moral socrática frente a la muerte.
