Las redes sociales y el uso abusivo de tecnología han creado ya trastornos diversos en la personalidad y la conducta, y en el caso de los niños, los psicólogos registran situaciones de menores con varios perfiles de facebook, que invitan al lesbianismo, homosexualidad y otros heterosexuales.
La advertencia la hizo ayer el psicólogo clínico Daniel Cueto, quien aseguró que se necesita regulación estatal y control de la familia, pues este fenómeno ya ha cambiado hasta la forma de comunicación entre los miembros de una misma familia.
El profesional de la conducta analizó el uso abusivo y la fomofobia o adicción al teléfono, hasta el punto que si a una persona se le queda en su casa el móvil, el día se le trastorna.

En las familias en donde no se organiza la dinámica, las disfuncionalidades son evidentes, a la hora del almuerzo, todos los integrantes tienen a mano sus aparatos.
Este fenómeno, dice Cueto, ya es estudiado por psicólogos, psiquiatras y juristas, pues a pesar de que la tecnología constituye una maravilla, su abuso causa adicción y daña el comportamiento grupal y familiar.
Argumentos. El hecho es, analiza el profesional, que la tecnología se mezcla con la falta de educación, la inmediatez, falta de formación y se convierte en una herramienta nociva que puede influenciar a otros.
“Aquí hay casos de una familia de seis miembros, uno conduce el auto en silencio, no tiene con quien hablar, porque los otros cinco integrantes del clan tienen cada uno un móvil y una conexión diferente”, dice al señalar que eso implica una pérdida de la comunicación.
“Esto hace que las personas no se puedan comunicar directamente, se pierde el sentido de darse cariño, tocarse, abrazarse, porque todo se hace a través de aparatos”, insistió Cueto.
Pornografía. A las consultas de los psicólogos llegan casos de niños con trastornos por el uso y abuso del internet.
El profesional aseguró que en muchas familias no hay ningún tipo de control o filtro y que esto constituye un peligro latente.
“El acceso a la pornografía puede dañar la sexualidad de un pequeño, hembra o varón y generar incluso estrés postraumático. Esto debe ser asumido por las familias, las cuales no pueden dejar las conexiones del internet al libre albedríos de los menores de edad, pues pueden ser usado por depredadores sexuales que los dañan”.
Trastornos. Cueto dijo que así como se genera una dependencia al móvil que puede llevar a la persona hasta un ataque de pánico, existe el Phubbing, que es ignorar parcial o totalmente la presencia de otra persona, por estar atentos al celular. El profesional pidió buscar ayuda con terapeutas.
Cueto habló además del Ringxiety o timbre y ansiedad, lo que significa ansiedad ante el timbre, es la sensación de que suena el timbre, aunque no sea cierto. “Son personas que deben tratarse, porque viven atrapados en una adicción al teléfono”.
El especialista llamó la atención sobre el ciber internet, “la gente vive como si no pudiera vivir sin esta herramienta”.