POR ANNA JIMÉNEZ
Es una enfermedad inflamatoria (irritación e hinchazón) cutánea común caracterizada por episodios frecuentes de enrojecimiento, prurito y escamas gruesas, secas y plateadas en la piel.
CAUSAS, INCIDENCIA Y FACTORES DE RIESGO
La psoriasis es muy común, y afecta aproximadamente a 3 millones de estadounidenses. Esta enfermedad puede desarrollarse en forma repentina o gradual y en muchos casos desaparece y reaparece repetidas veces con el paso del tiempo. Esta condición puede afectar a las personas en cualquier edad, aunque comúnmente comienza entre los 15 y 35 años.
La psoriasis parece ser un trastorno hereditario que puede estar relacionado con una respuesta inflamatoria en la cual el sistema inmune accidentalmente ataca las células del propio cuerpo. Se puede presentar con más frecuencia en el tronco, los codos, las rodillas, el cuero cabelludo, los pliegues de la piel o las uñas de las manos, pero puede afectar cualquiera o todas las partes de la piel.
Normalmente, las células nuevas de la piel toman cerca de un mes para desplazarse desde las capas inferiores hasta la superficie. En la psoriasis, este proceso tarda sólo unos pocos días, ocasionando una acumulación de células cutáneas muertas y la formación de escamas gruesas.
La psoriasis se puede agravar por lesión o por irritación (heridas, quemaduras, erupciones, picaduras de insecto) y puede ser severa en personas inmunosuprimidas (como, por ejemplo, aquellas con tratamiento de quimioterapia para el cáncer o con SIDA) o quienes han presentado otros trastornos autoinmunes (como la artritis reumatoidea).
Los medicamentos, las infecciones virales o bacterianas, el excesivo consumo de alcohol, la obesidad, la falta de exposición a la luz solar, la sobreexposición a la luz solar, el estrés, la salud general deficiente, el clima frío y la fricción frecuente de la piel están también asociadas con brotes de psoriasis. Esta condición no es contagiosa.
SINTOMAS
Parches cutáneos
secos o rojos
normalmente cubiertos de escamas plateadas
parches levantados en la piel
acompañados de bordes rojos
se pueden agrietar y doler
parches normalmente discretos y demarcados
normalmente localizados en los codos, las rodillas, el tronco, el cuero cabelludo, las manos o las uñas
Lesiones cutáneas que incluyen pústulas, agrietamiento de la piel, inflamación o enrojecimiento de la piel
Prurito
Pequeños puntos descamativos en la piel (especialmente en los niños)
Dolor o achaque articular que puede estar asociado con un tipo especial de artritis (artritis psoriásica)
Otros síntomas que pueden estar asociados con esta enfermedad son:
Anomalías en la uña
Lesiones genitales en los hombres
Secreción, ardor y prurito en los ojos
Aumento en el lagrimeo
SIGNOS Y EXÁMENES
El diagnóstico se basa usualmente en el aspecto de la piel.
Se puede requerir una biopsia de piel o raspado y cultivo de los parches cutáneos para descartar otros trastornos.
Se puede hacer una radiografía para detectar artritis psoriásica, en caso de que se presente dolor articular y éste sea persistente.
TRATAMIENTO
El tratamiento se centra en el control de los síntomas y la prevención de las infecciones secundarias y varía de acuerdo con el grado y severidad del trastorno. Los casos resistentes o severos pueden requerir tratamiento intensivo.
Las lesiones psoriásicas que cubren toda o la mayor parte del cuerpo son un síntoma de emergencia que requiere hospitalización. El trastorno puede causar dolor muy agudo. El cuerpo pierde grandes cantidades de líquido y se aumenta la susceptibilidad a infecciones secundarias severas que se pueden convertir en sistémicas, comprometiendo órganos internos y progresando hacia un shock séptico y la muerte. El tratamiento abarca analgésicos, sedantes, líquidos intravenosos y antibióticos.
Los casos leves normalmente se tratan en el hogar. Los medicamentos tópicos pueden ser:
Champús contra la caspa con o sin prescripción médica
Champús o lociones que contengan alquitrán de hulla
Cortisona u otros corticosteroides
Lubricantes
Medicamentos antimicóticos
Antibióticos
Fenol
Cloruro sódico
Otros ingredientes
Se pueden prescribir medicamentos inmunosupresores inyectados o por vía oral (tales como corticosteroides o metotrexato), pero únicamente en casos muy severos. También se podrían prescribir otros medicamentos como los retinoides o la ciclosporina.
Otros tratamientos pueden comprender la exposición moderada a la luz solar o la fototerapia. La piel se sensibiliza aplicando un ungüento a base de alquitrán de hulla o administrando psoralenos orales (un medicamento que hace que la piel se torne sensible a la luz). Luego, la persona es expuesta a la luz ultravioleta. Se debe evitar la quemadura solar que puede empeorar la condición.
Para los pacientes que sufren una forma severa de la enfermedad existe una nueva opción que consiste en el tratamiento con medicamentos como etanercep (Enbrel) el cual ataca la causa de la psoriasis a nivel celular. Sin embargo, estos medicamentos son muy costosos y, al igual que todos los medicamentos, pueden causar efectos secundarios. Etanercep está aprovado por la FDA para el tratamiento de la artritis psoriásica y de la psoriasis.
La artritis psoriásica, la cual se desarrolla en un pequeño porcentaje de pacientes con psoriasis, se puede tratar con analgésicos no esteroideos casi de la misma forma que la artritis normal.
El paciente debe mantener una buena salud en general para reducir el riesgo de nuevos brotes y mantener un plan adecuado de reposo y ejercicio, consumir una dieta bien balanceada, evitar el estrés (ver manejo del estrés) y tratar con prontitud las infecciones respiratorias o de otra índole.
Se debe conservar una buena higiene de la piel para prevenir infecciones secundarias, por lo que se recomienda bañarse o ducharse diariamente. Igualmente, se debe evitar frotarse en forma áspera, ya que podría irritar la piel y causar nuevos brotes de la enfermedad.
Los baños de harina de avena pueden actuar como calmante y ayudar a aflojar las escamas. Se pueden utilizar igualmente preparaciones comerciales o mezclar una taza de dicha harina en la bañera con agua caliente.
GRUPOS DE APOYO
Si la persona con psoriasis se siente muy estresada, se le recomienda vincularse a un grupo de apoyo para la psoriasis, en el que los integrantes comparten experiencias y problemas en común.
Expectativas (pronóstico)
La psoriasis es una condición crónica de por vida que se puede controlar mediante el tratamiento. Normalmente, no afecta la salud general, a menos que no se trate en forma adecuada o que se presente en personas de avanzada edad o muy jóvenes.
COMPLICACIONES
Complicaciones secundarias de los tratamientos
Infecciones secundarias de la piel con diseminación a órganos internos.
ASISTENCIA MÉDICA…
Se debe buscar asistencia médica si los síntomas indican psoriasis o si la enfermedad recurre con frecuencia a pesar del tratamiento.
En caso de presentarse un brote grave que cubra toda o la mayor parte del cuerpo se debe acudir a la sala de emergencias o llamar al número local de emergencias (911 en los Estados Unidos).
De la misma manera, se debe buscar asistencia médica si se desarrollan pústulas, fiebre, dolor muscular, fatiga u otros síntomas diferentes o inexplicables.