San Juan. El entusiasta del béisbol Jorge Fidel López ha publicado el libro “Sobre la vida de Hiram Gabriel Bithorn Sosa”, que relata cronológicamente la historia del primer pelotero puertorriqueño en las Grandes Ligas, que habría cumplido hoy cien años. En entrevista hoy con Efe, López explicó que decidió hacer este texto para resaltar el legado deportivo de Bithorn porque no había nada escrito oficialmente en español sobre el fenecido deportista y porque internet ofrece información incorrecta del sanjuanero.
López detalló que parte de la información incorrecta de Bithorn que encontró en la web es que se decía que era de nacionalidad cubana. También encontró incorrecciones en su fecha de nacimiento, el día de su debut en las Grandes Ligas y las estadísticas del pelotero en los cuatro años que jugó en los EE.UU. Bithorn debutó en las Grandes Ligas, como lanzador, con los Cachorros de Chicago, en la Liga Nacional, el 15 de abril de 1942, cinco años antes de que Jackie Robinson rompiera la barrera racial en el deporte, como el primer jugador negro en las Grandes Ligas.
López contó que Bithorn comenzó a jugar a nivel profesional en 1936 con 20 años con la organización de los Yankees de Nueva York, dos años antes de que se organizara la liga semiprofesional de béisbol de Puerto Rico, con la que jugó con los Senadores de San Juan en 1938, pero como extranjero. En ese primer año de estreno del torneo puertorriqueño con los Senadores no se le permitió lanzar, y fue movido entonces a jugar primera y tercera base.
Los Senadores, dirigidos en aquel momento por Billo Torruella, no jugaban de manera efectiva, por lo que la organización despidió al manager y lo reemplazó con Bithorn, quien con tan solo 22 años se convirtió en ese entonces en el dirigente más joven en la historia en la liga puertorriqueña.
En Puerto Rico jugó durante diez temporadas y representó a los Yankees durante varios años pasando por las diversas divisiones de liga menor hasta que se incorporó al equipo Hollywood Stars, en la Liga del Pacífico. No obstante, en 1941 los Cachorros de Chicago lo invitaron a sus campos de entrenamiento previo a la temporada regular, pero no fue hasta el año próximo que entró oficialmente al equipo.