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Estudio para el desarrollo

Es altamente necesario que el Gobierno haga suyo el estudio Mapa de Desarrollo Humano de la República Dominicana, del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el cual serviría de marco para la elaboración y ejecución de políticas que permitan al país alcanzar un desarrollo sostenido, y especialmente si realmente procura enfrentar la pobreza.

El estudio, fechado en junio pasado, expone los rasgos sobre la inequidad económica y social del país, incluyendo educación, salud, género y un análisis territorial, entre otros aspectos. Una de las preocupaciones del organismo es que a pesar de de que el país posee una de las economías más dinámicas de la región Latinoamericana, las inequidades existentes, que se expresan con mayor amplitud en los asentamientos humanos, no permiten equiparar los logros económicos con los avances en términos sociales.

En efecto, entre el 2004 y el 2012 la economía tuvo un crecimiento notable, en promedio de 4.7%, por encima del registrado en Latinoamérica, sin embargo, una parte importante de la población continúa en situación de pobreza, vulnerabilidad, privación y exclusión.

Eso es una demostración de que a pesar de que la economía dominicana exhibe una gran fortaleza para enfrentar las dificultades internas y externas, los logros en materia de crecimiento no son consistentes con los avances en los indicadores sociales que evidencian el desarrollo humano, y que dejan ver que en la bonanza económica prevalecen privaciones y brechas de acceso a servicios sociales que limitan las oportunidades de tener un adecuado nivel de bienestar. En lo que tiene que ver al acceso a los servicios de saneamiento en los hogares de las diferentes demarcaciones geográficas, se evidencia las inequidades que sufren la población y que limitan sus oportunidades de acceder a mejores condiciones de salud.

 

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