Minería (I)

La riqueza geológica, el marco jurídico para la inversión privada y de repatriación de utilidades, convierten al país en uno de los destinos más atractivos para invertir en el área minera.

República Dominicana es de tradición minera y mantiene una presencia de empresas líderes a nivel internacional. Contamos con un enorme potencial geológico en diferentes zonas, tanto de mineral metálico como no metálico.

Actualmente explotamos oro, plata, ferroníquel, bauxita y mármol en gran escala, y en forma artesanal el larimar, lo que es un reflejo no sólo de abundancia de recursos y de la capacidad de producción de la actividad minera sino de la estabilidad macroeconómica y política. Los minerales producidos son de gran demanda en el mercado mundial, cuyo desarrollo se basa en la producción y la industria.

Estados Unidos, China, Suiza, Japón, Canadá y la Unión Europea son los principales demandantes. El Tratado de Libre Comercio Centroamérica, Estados Unidos y República Dominicana (DR-Cafta) hace al país más atractivo para la inversión extranjera, ya que ofrece a inversores la oportunidad de colocar la producción en esos mercados bajo las facilidades arancelarias.

En el país se ha detectado la presencia de petróleo y gas natural, pero todavía no se ha determinado el impacto a nivel comercial, lo que sería altamente importante para su explotación.

La presencia de yacimientos de oro en el subsuelo en las regiones de San Juan, Restauración y Miches son atractivos para que nuevas firmas internacionales vengan a invertir bajo el esquema de una explotación responsable, especialmente donde se ponga énfasis en la protección del medio ambiente.

El país ofrece oportunidades para los inversionistas interesados. Las oportunidades que ofrece nuestro país han hecho que seamos uno de las naciones de la región donde se observa mayor inversión en minería.