Hasta el momento las proyecciones indican que la economía dominicana continuará en el presente año en el segundo lugar en la región, sólo superada mínimamente por Panamá, que crecerá 5.6 por ciento, debido a la inversión en proyectos de infraestructura y exportaciones de servicios.

El Producto Interno Bruto de República Dominicana crecería 5%, gracias a un consumo doméstico sólido, un aumento del turismo y una mayor inversión pública, así como por la incidencia de la dinamización de la economía mundial.
Nicaragua ocuparía el tercer lugar con 4.4 por ciento, por una dinámica de la demanda interna. En cambio, las economías que tendrán un peor desempeño son Venezuela con una caída de 4.2%, Ecuador 0.8% y El Salvador 1.8%.
Una mayor incertidumbre política en Brasil, Guatemala y Perú podría frenar el crecimiento, debido que impactaría en la confianza de los agentes económicos.
En República Dominicana, el potenciar la inversión tanto pública como privada resulta esencial, así como también la diversificación de la estructura productiva hacia una con mayor valor agregado e incorporación de tecnología y conocimiento. El Presupuesto General del Estado para este año es de un monto de RD$814,821 millones, con un déficit fiscal de un 2.2% del PIB como una forma de mantener la confianza en la economía, lo que es una clara señal en esa dirección, y un elemento muy positivo en la gestión del presidente Danilo Medina.
La disciplina fiscal, como eje fundamental del presente Gobierno para continuar con la estabilidad Macroeconómica, es compromiso expreso del presidente Medina, lo que ha sido ponderado por agencias calificadoras internacionales y los organismos multilaterales.
En ese contexto se sigue avanzando en la consolidación y por eso se ha venido bajando consistentemente el nivel de déficit fiscal.