En las últimas semanas se ha registrado un aumento de los casos de personas con gripe, tanto en adultos como en niño; como parte de los llamados “resfriados comunes” que en tiempos de frío hacen acto de presencia en la República Dominicana.
Una de las maneras de combatir la gripe y otros virus es con una correcta alimentación y manteniendo alta defensa del organismo.
En ese sentido, del doctor Ricardo Marte, médico nutriólogo renal y metabólico, resalta además de la buena alimentación, que tiene que ver también con el consumo de frutas y vegetales, el distanciamiento, que no sólo ayuda a prevenir el coronavirus.
«Se aumentaron los casos gripales como nos vamos reuniendo otra vez», aseguró el experto, quien entiende que un sistema inmunológico «competitivo» nos ayudará a prevenir los virus de la temporada.
Marte recomendó la importancia de alimentarse comiendo frutas, especialmente aquellas que tienen alto contenido de vitamina C, como la guayaba, que de acuerdo al doctor es una de las que más contiene dicha sustancia. Pero además hizo un llamado a mantener la higiene tanto en las manos como los alimentos.
La BBC reseñó Aunque se necesitan más estudios para determinar los beneficios específicos de esta planta en los seres humanos, una investigación realizada en países del sur de Europa encontró un vínculo entre la frecuencia en el consumo de ajo y cebolla y un riesgo menor en el desarrollo de ciertos tipos de cáncer.
Hay que fortalecer el sistema inmune
Según WebMD, un sitio web estadounidense con información acerca de aspectos relacionados con la salud, el ajo tiene una variedad de antioxidantes que ataca a los «invasores» del sistema inmunitario.
«Uno de sus blancos es el Helicobacter Pylori, una bacteria asociada con algunas úlceras y con el cáncer de estómago».
Cereales
Varios estudios científicos sugieren que la deficiencia de vitamina B6, que se encuentra en la avena, el germen de trigo y el arroz, disminuye la respuesta del sistema inmunitario.
Un ejemplo de esta situación, según un artículo de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, en EE.UU., es la capacidad que tienen los linfocitos de madurar y transformarse en varios tipos de células T y B.
El suplemento moderado de cantidades que permitan nivelar la deficiencia de vitamina B6, restaura el funcionamiento del sistema inmune.
«Los cereales (la carne, el pescado, las castañas, el queso y el huevo) también tienen selenio, que además de beneficiar al sistema inmunitario, disminuye enfermedades infecciosas en ancianos y ayuda a la recuperación de los niños con infecciones en el tracto respiratorio», explica Williams.
Frutas cítricas
Según un artículo de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU., los refriados de la gente que consume vitamina C regularmente pueden durar menos tiempo y, además, sus síntomas suelen ser menos severos.
«En los adultos, la duración se reduce en 8% y en los niños en 13,6%. Diferentes estudios han demostrado que si en los meses de invierno se van a realizar actividades físicas exigentes o se va a estar expuesto a frío intenso, el consumo de vitamina C disminuye a la mitad la posibilidad de contraer un resfrío», complementa Williams.
Se debe considerar, sin embargo, que una vez que se tiene la enfermedad, no tiene efectos terapéuticos.
Adicionalmente, la vitamina C es importante para la formación de proteínas que se usan en la piel, los tendones, los ligamentos y los vasos sanguíneos.
También ayuda a la cicatrización de heridas y a la reparación de cartílagos, huesos y dientes.