Todos los órganos del cuerpo son propensos a enfermar, desde el corazón o los pulmones hasta los ojos, así pues, el cerebro (como órgano que es) también puede enfermar. Una de las enfermedades que puede padecer es la esquizofrenia, una de las peores enfermedades mentales en cuanto a síntomas y fases se refiere.
La investigación en el campo de las enfermedades mentales no está muy avanzada, y por consiguiente, no se conoce demasiado de la esquizofrenia, ni en que consiste exactamente ni sus posibles tratamientos y, mucho menos, de su cura. En la actualidad existen varias opiniones referidas a la esquizofrenia y a la causa de ésta.
Se puede definir esta enfermedad como un trastorno psiquiátrico que incluye graves problemas con el pensar, los sentimientos y el comportamiento; pero esta definición es demasiado general y demasiado ambigua, así que intentaremos dar una definición de la esquizofrenia comparando un cerebro sano y un cerebro que está afectado por la esquizofrenia.
El cerebro está formado por unas células llamadas neuronas que sólo están en el cerebro; estas células forman un entramado de manera que, sin tocarse, están muy cerca unas de las otras. Las neuronas constan de un núcleo, las dendritas y el cuerpo. En el núcleo hay unas vesículas con unas sustancias llamadas neurotransmisores que se segregan al exterior y son recogidas en parte por los receptores que hay en las dendritas de la neurona siguiente. Este flujo de neurotransmisores es el que conforma la corriente nerviosa que hace posible que seamos conscientes de nosotros mismos y de lo que nos rodea. Hasta aquí el funcionamiento de un cerebro sano. Cuando se desencadena un episodio esquizofrénico se experimenta una alteración en la sensopercepción, el curso y el contenido del pensamiento y en su afectividad. Todo esto es debido según los expertos a un exceso de la sensibilidad en el receptor de uno de estos neurotransmisores llamado dopamina. Habría, entonces, un exceso de dopamina en el circuito de la corriente nerviosa del cerebro que podría estar relacionado con los síntomas psicóticos positivos.
En la enfermedad también pueden estar implicados otros transmisores, pero aún no se conocen.
La esquizofrenia significa una desintegración de la personalidad, por lo cual al enfermo le cuesta distinguir entre lo real y lo irreal. Hay tópicos referentes a la esquizofrenia, como puede ser que las personas afectadas por esta enfermedad son agresivas o peligrosas, o que la enfermedad consiste en una múltiple personalidad; estas creencias populares son falsas: es cierto que un esquizofrénico puede actuar de manera extraña, pero normalmente se comportan de manera apropiada.
INICIO Y FASES DE LA ESQUIZOFRENIA
El inicio de la enfermedad es duro y confuso. Normalmente la esquizofrenia se empieza a desarrollar al final de la adolescencia, cuando se empieza la edad adulta, en que se exige al enfermo una mayor autonomía y asume una mayor responsabilidad.
SÍNTOMAS DE LA ESQUIZOFRENIA
– Alteración del contenido del pensamiento
Parece no tener pensamientos propios, que provengan de otras personas. A veces parece que los pensamientos desaparecen de la mente. Parece como si los pensamientos se hicieran en voz alta, como si alguien pudiera escucharlos. A veces se tiene la sensación de que todo el mundo sabe lo que estas pensando.
LOS DELIRIOS
Son ideas imaginarias que el enfermo vive con total convencimiento de su veracidad. A veces parecen una iluminación. La persona que sufre estos delirios están convencidos de que aquello que ven o que piensan es totalmente cierto. Hay distintos tipos de delirios:
– Delirio de persecución
La persona considera que hay una especie de complot contra ella, que puede estar formado por los vecinos, por grupos étnicos distintos al suyo, por la CIA o el KGB. De repente se convierte en un personaje importante que se encuentra en medio de una trama muy complicada, como si eso fuera lo más natural del mundo. Le quieren perjudicar, agredir, es injustamente perseguido, espiado y observado.
– Delirio de celos
La persona está convencida de que el marido o la mujer le engaña. Saca datos de su alrededor para darle forma a su delirio. Observa miradas, sonrisas, atenciones, etc. Y todos tienen el significado de la infidelidad
– Delirio de culpa
La persona atribuye todo el enredo de su mundo psicótico a algo que ha hecho mal, según su criterio: ha llevado una vida llena de excesos, ha sido muy promiscuo sexualmente, se ha comportado mal con sus padres, etc.
– Delirio de grandeza
El enfermo considera que es una persona escogida por un ser superior y como tal está por encima del resto de los mortales. Este delirio de grandeza puede ir des de creer que es el más inteligente del mundo hasta creer que tiene un mensaje útil para la humanidad del que el único conocedor es él.
A veces piensan que son hijos de un rey o de una persona importante, pero que de pequeños los secuestraron y los hicieron crecer en el sino de una familia modesta.
– Delirio místico
La persona puede entrar en una fase de misticismo religioso importante, y ve en cualquier acción la posibilidad de pecado. Hace penitencia, oración y busca la perfección en sus conductas
– Delirio somático
El enfermo se cree que tiene algunas deformidades físicas, aunque no sea así en realidad. Piensan que tienen un moflete más grande que otro, que tiene las piernas delgadas y los brazos largos y que por eso la gente los mira por la calle y se ríen de ellos.
– Delirio de referencia
En este tipo de delirio todo lo que pasa alrededor del enfermo tiene un significado para él. Él es el centro del universo y no hay nada que pase o se diga por casualidad. Lo que dicen en la tele tiene referencia con actos o ideas suyas, igual que la prensa o cualquier anuncio de la calle. Esto crea en el enfermo un estado de tensión continuado y provoca a veces reacciones agresivas.
– Delirio de control
El enfermo cree que su pensamiento está dirigido por otras personas, reales o imaginarias, extraterrestres o seres superiores y la forma de dominarle el cerebro puede ser mediante artilugios que hay en la habitación, satélites espaciales o ondas que se trasmiten a través del espacio.
Alteración del curso del pensamiento
Alteración de la sensopercepción: Otra área afectada por la esquizofrenia es lo que nosotros percibimos por los sentidos, la sensopercepción. Oyen y huelen cosas que los demás no perciben, y con menos frecuencia ven cosas que no ven los otros.
Las alucinaciones: Hay varios tipos de alucinaciones; las más comunes son las auditivas. El enfermo oye voces que pueden ser agradables o que dan buenos consejos o al contrario. Es típico oír a los vecinos o a la gente desconocida haciendo comentarios sobre ellos.
Otro tipo de alucinaciones, pero menos frecuentes, son las alucinaciones cenestopáticas, sensaciones en el cuerpo, como pinchazos, etc.
Por último, existen también las alucinaciones olfativas y visuales, que producen sensaciones de estar oliendo o viendo algo que no existe.
– Alteración de la afectividad
La efectividad puede ser alterada de distintas formas. Hay una ambigüedad en los sentimientos, sobretodo en los referidos a los padres; tan pronto pueden manifestar cariño y agradecimiento como se puede culpar a los padres del estado en el que se está. Por otro lado, la felicidad y la tristeza se pueden cambiar o se puede reír o llorar sin ningún motivo aparente.
También la forma de vestir o de ordenar las cosas puede variar o, a demás, puede costar mucho más prestar atención a las cosas o cuando se está hablando con alguien.
– Conductas extravagantes
El enfermo de esquizofrenia acostumbra a descuidar su imagen: no se cambia de ropa, va de forma extravagante, va sucio y dejado, a veces llevan ropa de invierno y de verano a la vez, y pueden ir como disfrazados, etc.
Con respecto a su convivencia con la sociedad, los esquizofrénicos se encierran en sí mismos y se aíslan de todo o, todo lo contrario, se vuelven personas que no se callan, personas empalagosas.
– La agresividad
Sobretodo en las primeras apariciones de la enfermedad se puede dar un estado de agresividad en el enfermo. Esto es debido principalmente a sus delirios, al pensar que la gente que le rodea le está criticando continuamente o a creerse el centro de todas las miradas. A causa de su necesidad de afección, pueden tener reacciones de celosía.
Las reacciones agresivas pueden ser verbales (insultos, palabrotas, etc.) o también golpes y puñetazos contra muebles y objetos que les rodean o incluso a las personas que están con él, pudiendo producirles lesiones graves si tienen al abasto cuchillos o otros elementos peligrosos. Estas reacciones no son premeditadas, es como si en su interior se produciera un corto-circuito.
Al no ser conscientes de lo que hacen, no sienten remordimientos después de sufrir una reacción agresiva, si un caso, se arrepienten al día siguiente o al cabo de un buen rato.
Falta de energía
Trastornos emocionales
Depresión
Retraimiento social
Actualmente se cuenta con un gran número de fármacos que pueden actuar sobre la ansiedad, la depresión, la psicosis, el sueño, los trastornos del apetito, las obsesiones, las convulsiones y otras múltiples enfermedades mentales.
A pesar de los avances científicos aún no hay una total confianza de la población y si bien es cierto que algunos psicofármacos no cuentan con un 100% de efectividad y algunos grupos en contra de ellos se apoyan en este argumento, no es menos cierto que la psicoterapia tampoco la tiene.
Así pues, se debe hacer el tratamiento combinado entre psicoterapia y los psicofármacos para lograr unos mejores resultados.