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Los principales  mitos respecto  al cabello natural

+  Que estilo<BR>Los principales  mitos respecto  al cabello natural

Existen muchos mitos alrededor del cabello natural, y en este artículo voy a mencionar algunos de ellos, los cuales son los que la gente menciona a diario cuando me escribe pidiendo consejo sobre cómo cuidar su cabello o cómo estilizarlo.

1. El cabello natural (crespo) no crece.  El cabello en una condición normal crece de 1 a 3 centímetros por mes, esto aplica para el cabello natural rizado, lacio o tratado con químicos.

Su crecimiento depende de la alimentación de la persona y su condición emocional y física. Ahora, el factor que  no hemos tomado en cuenta es que el cabello rizado y el crespo se puede encoger hasta un 85% de su largo, por lo cual puede darnos la impresión de que no crece.

2. El  cabello crespo es el cabello más fuerte de todos.  El cabello rizado y el crespo al igual que los demás tipos de cabello pueden tener diferente grosor, de hecho una gran cantidad de las mujeres que tienen el cabello crespo tienen cabello fino. El problema con este mito es que tenemos la tendencia a pensar que nuestro cabello es resistente a todo tipo de proceso y maltrato, con lo cual exageramos en algunos procesos y luego los  resultados pueden ser frustrantes.

3. El cabello al natural es difícil de desenredar.  Si bien es cierto que desenredar nuestro tipo de cabello a simple vista puede parecer todo un reto (y lo es en muchas ocasiones) también es cierto de que a veces no usamos técnicas correctas para desenredar. Debemos recordar que nuestro cabello (y todo cabello que se enrede) debe dividirse en secciones y desenredar de la punta a la raíz, evitando tirar bruscamente del él para que no se parta ni se maltrate.

4. El alisado hace crecer  el cabello y cortar las puntas también.  El alisado, como producto químico corrosivo, va muy lejos de promover el crecimiento del cabello, muy por el contrario, a veces las quemaduras que deja en algunas aplicaciones pueden hacer que una parte del cabello parezca crecer menos que otra.

Lo que ocurre es que cuando nuestro cabello tiene crecimiento y aplicamos el alisado es obvio que se vea más largo, pues estamos estirando aquel cabello rizado que está encogido, y nos puede hacer pensar que el alisado nos hizo crecer el cabello.

Por otro lado, cortar las puntas  simplemente ayuda a mantenerlas  saludables, pero poco tiene que ver con que el cabello crezca o no.

También existe la teoría de que las puntas deben cortarse regularmente, cuando la realidad es que si las puntas están saludables usted no necesita cortarlas aunque pasen meses.

5. Dejar el cabello en su estado natural es sólo para revolucionarias y hippies o evangélicas.  El cabello es parte de nuestro cuerpo así como las pestañas, uñas y demás; la decisión de mantener el cabello al natural no necesariamente debe encasillar a una persona en un movimiento o religión específica, mucha gente simplemente ha decidido que lo mejor para su salud es evitar al máximo los químicos dañinos al cuerpo en sus productos del diario vivir y a lo mejor estas personas no se han planteado nunca que esta decisión tenga que relacionarse con un pensamiento político o religioso.

6. Las personas que usan “dreadlocks” (rastas) o cabello natural son sucios o poco profesionales.  Las rutinas de higiene varían de un ser humano a otro y son prácticas muy personales que nada tienen que ver con qué tipo de cabello tenga, sino que pueden más bien reflejar costumbres aprendidas en la cultura donde crece o simplemente ser una preferencia personal de cada quien (ejemplo: hay personas que piensan que lavar su piel con jabón elimina la grasa natural de su piel, por lo que limpian su cuerpo solo con aceites y agua, lo cual funciona perfectamente para ellos).

Por otro lado, el desempeño que una persona pueda tener en su carrera profesional no debe relacionarse con la condición o estilo que ésta le da a su cabello, recuerde que lo importante es lo que habita dentro de nuestra cabeza y no lo que crece fuera de ella.

Así que si alguna vez va a un banco y la persona que le atiende tiene un peinado inusual y no parecido al estereotipo al que está usted acostumbrado, deténgase a pensar que a lo mejor esta persona puso igual dedicación y empeño en obtener su empleo que el  que habría puesto si tuviera el cabello lacio.

¡Hasta la próxima!

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