Qué linda en el tope estás…

Qué linda en el tope estás…

El día de ayer, 27 de febrero, los dominicanos celebramos 171 años de independencia, de soberanía y autodeterminación.

Esta es una fecha gloriosa que nos invita a honrar con respeto y admiración nuestros símbolos patrios, a cumplir las leyes dominicanas (base de nuestro sistema constitucional y garantía del correcto ejercicio de nuestros derechos) y a recordar con reverencia a nuestros héroes patrios, que pagaron el precio de una libertad costosa e intrincada, como lo revelan las páginas de nuestra historia.

Una de las formas en las que todo pueblo libre y soberano, que se aferra a su identidad y valora su cultura, debe demostrar su patriotismo sincero es conociendo sus símbolos patrios y la historia detrás de ellos. Esto significa darle paso al conocimiento para dejar atrás la ignorancia y el oscurantismo. Significa ser portavoces de estos saberes y trasplantarlos de una generación a la siguiente: una tradición viva y perenne, latente en nuestras conciencias y corazones que nos abrace como a un solo hombre, es decir, como a una unidad, como a un solo pueblo en medio de muchas naciones: el pueblo dominicano. Personas que comparten un lenguaje, un sonido, una cultura, una historia.

No podría resultar más apropiada la frase del escritor y cineasta estadounidense Michael Crichton: “Si uno no sabe historia, no sabe nada: es como ser una hoja y no saber que forma parte del árbol”.

Es por ello que le invitamos a conocer más sobre la Bandera Nacional, sus diferentes componentes, simbología y significado.

Hija de un juramento. La primera vez que se hace mención de la bandera dominicana es en el Juramento Trinitario de la secreta Sociedad Trinitaria, fundada el 16 de julio de 1838 en casa de Josefa Pérez de la Paz por un joven Juan Pablo Duarte de 25 años de edad. El juramento establecía lo siguiente: “…República Dominicana (…) tendrá su pabellón tricolor, en cuartos encarnados y azules, atravesados con una cruz blanca”.

También podemos afirmar que desde el génesis de esta organización se definen los tres pilares que identifican a la nación dominicana en su bandera nacional, los cuales son Dios, Patria y Libertad: “Mientras tanto seremos reconocidos los trinitarios con las palabras sacramentales: Dios, Patria y Libertad”.

Los historiadores dominicanos entienden que la bandera dominicana fue ideada por el propio Juan Pablo Duarte. En cuanto a su confección, fue elaborada por Concepción Bona, María Trinidad Sánchez, Isabel Sosa, María de Jesús Pina, las hermanas Villa, Ana Apolinaria Pérez Roex y Ana Valverde, según apunta el historiador Rafael Leónidas Pérez del Instituto Duartiano.

La bandera dominicana ondeó por primera vez la noche del 27 de febrero de 1844 en el Baluarte de San Genaro de la Puerta del Conde, una vez que Ramón Matías Mella disparó el trabucazo en la Puerta de la Misericordia.

Cabe destacar que esta primera bandera carecía del escudo que se observa en la actual, el cual atravesó por 20 distintas modificaciones hasta llegar a su forma actual, establecida durante el gobierno de Adolfo A. Nouel, en el año 1913.

Fondo y forma. Las generalidades de nuestra bandera están contenidas en los artículos 31 y 32 de nuestra Constitución y estipulan que “la Bandera Nacional se compone de los colores azul ultramar y rojo bermellón, en cuarteles alternados” …separados por una cruz blanca. El azul debe quedar hacia la parte superior del asta y a la izquierda del espectador. El color rojo representa la sangre derramada por nuestros libertadores, el azul, la protección de Dios, y la cruz blanca es “el símbolo de la lucha de los libertadores por legarnos una patria libre”, explica el historiador Juan Daniel Balcácer.

En cuanto al escudo, una de sus características más inconfundibles es la Biblia abierta en el evangelio de san Juan capítulo 8, verso 32 que proclama: “Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”.

Cabe destacar que durante la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, específicamente en el año 1938, se oficializó como Día de la Bandera el 24 de octubre, fecha del cumpleaños de Trujillo; a partir de 1963 se cambió la celebración al 27 de febrero y actualmente se celebra el 25 de febrero, fecha que coincide con el natalicio del patricio Ramón Matías Mella.

Arriba el pabellón

¡Tercien armas! ¡como quiera!
el acostumbrado estruendo
ello es que el sol va saliendo
y hay que enhestar la bandera.

Enfilando pelotón
de la guardia somnolienta
al pie del asta presenta
arbitraria formación.

Y hechas a las dos auroras
en que cielo y patria están
pasan de largo a su afán
las gentes madrugadoras.

Ni ven el sol de la raza
cuyos colores lozanos
tremulan entre las manos
del ayudante de la plaza.

Ni del lienzo nacional
fijo ya a delgada driza
recuerda que simboliza
toda una historia inmortal.

Pues cada matiz encierra
lo que hicieron los mayores
por el bien y los honores
y el rescate de la tierra.
El rojo de su gloriosa
decisión dice al oído,
“Soy -dice- el laurel teñido
con su sangre generosa.”

Es el azul de su anhelo
progresitas clara enseña
color con que el alma sueña
cuando sueña con el cielo.

El blanco póstumo amor
a sus entrañas se aferra
dar por corona a la guerra
el olivo al redentor.

¡Presenten armas!, ya ondea
el pabellón y se encumbra
bajo el sol que deslumbra
y al clarín que clamorea;

ladra un can del estridente
sonido sobresaltado
arde en aromas el prado
rompe en trinos el ambiente.

¡Qué linda en el tope estás
dominicana bandera!
¡Quién te viera, quién te viera
más arriba, mucho más!
Gastón Fernando Deligne

Publicaciones Relacionadas

Más leídas