Efectivamente, qué pasaría si China, igualmente una gran potencia, actuara y se comportara tan provocativa e injerencistamente como EEUU y algunos de sus aliados incondicionales.
En el mundo todos necesitamos vivir en paz y tranquilidad y resolver los problemas que nos impacten en un marco de cooperación.
Recurrir a amenazas y despliegue de fuerzas desafiantes solo puede llevar a respuestas que, a veces, pueden descontrolarse y generar un ciclo de acción y reacción. Washington se comporta como si su voluntad e intereses estuviesen por encima del orden mundial y el derecho internacional.
China es una gran potencia y si fuésemos capaces de analizar la situación objetivamente reconoceríamos que sus “amenazas” y “desafíos” se limitan a acrecentar su economía aceleradamente y cultivar vínculos económicos intensos, lo que es visto por EEUU como un peligro para su hegemonía histórica.
Debieran aprender de la historia y promover la cooperación. La única forma de construir un mundo más seguro es mediante la negociación, lo otro es suicidio. Recientemente, un corresponsal de la española agencia de noticias EFE renunció en carta pública asqueado por la manipulación y barraje de “fake news” que muchos medios se inventan y difunden sobre China.
Muchos representantes de la “prensa libre” lo han ocultado.
Seamos realistas.
Qué pasaría si Beijing desencadenase una campaña a favor de la independencia de Puerto Rico, de Texas o de aquellos Estados donde actúan grupúsculos que pretenden independizarse de la Unión. Qué pasará si a esas fuerzas las calificase de “patriotas” como hacen con quienes pretenden desprender a Hong Kong y otros territorios chinos de la soberanía nacional.
Qué pasaría si, asumiendo los mismos derechos soberanos que corresponden a cada nación, China crease una fuerza tripartita con Cuba y Venezuela para enfrentar los desafíos del Caribe. Qué pasaría si Beijing emprendiese una campaña mundial por la violación fragrante de los derechos humanos en sectores de la población norteamericana.
Qué pasaría si China calificase de “campo de concentración” la cárcel para islámicos en Guantánamo, acusados de terrorismo aunque, ciertamente, sin protección legal. Qué pasaría si China construyese tan solo el 5% de las bases en el exterior que tiene EEUU. Todo eso se lo hacen a China.
Lo primero que pasaría es que desde Washington y otras capitales se escandalizarían de la “agresividad china”. Lo segundo que pasaría es que una buena parte de los medios internacionales no reproducirían esos comentarios, algunos, incluso, ni como “espacio pagado”, aunque se declaran muy transparentes y veraces. En RD disfrutamos de unos medios muy abiertos: un privilegio.