Dos más dos
 Es probable que mucha gente se sienta hoy tentada a compartir la opinión de doña Milagros Ortíz Bosch, quien asegura que la agresividad verbal que nanifiesta el presidente Fernández constituye una provocación al PRD para mantener el tranque en torno al Presupuesto y seguirse manejando con el del año pasado, convencida esa gente, al igual que la ex Vicepresidenta, de que es la única explicación posible al talante belicoso y ríspido que asume el discurso del mandatario al referirse a sus adversarios políticos, como quedó sobradamente evidenciado durante su participación en el masivo acto de proclamación de los candidados peledeístas celebrado el pasado domingo en el Palacio de los Deportes. Allí volvió a hablar de «la tiranía de la mayoría» que ejerce el PRD en el Congreso Nacional, acusó a la Alianza Rosada de pretender el asalto de las instituciones del país, y hasta recurrió a la sorna -un arma poco frecuente en su arsenal retórico– para burlarse del «astrólogo» que predijo que el PLD apenas alcanzará dos senadores en mayo próximo. Doña Milagros y quienes piensen como ella podrían tener o no razón, algo que podría discutirse ad infinitum, pero a veces solo basta sumar dos mas dos para recordar que siguen siendo cuatro.

Advertencia

 Será difícil no tomar en cuenta, en medio de las discusiones sobre la conveniencia o no de utilizar el voto electrónico en las elecciones congresionales y municipales de mayo próximo, las declaraciones del doctor Nelson Ramos, presidente de la Cámara Contenciosa de la JCE, en las que afirma que es «prácticamente imposible» poner en práctica esa modalidad de sufragio en esos comicios, ni siquiera –puntualiza– a nivel de plan piloto. La advertencia, por venir de quien viene, debe ser tomada con toda la seriedad que amerita, mucho mas si llega acompañada de otra advertencia más inquietante todavía: la tardanza en la entrega de recursos a la JCE está poniendo «en peligro» la organización del proceso, pues ya se está con el tiempo en contra. Si el atraso es tan grande como dice el doctor Ramos, resulta evidente entonces cuál es la prioridad del momento, como resulta evidente también que el invento del voto electrónico debe esperar una ocasión más propicia para su implementación como lo serían las elecciones presidenciales del 2008. Y allá nos vemos.

Parqueos

 Si criticable es el hecho de que el ayuntamiento del Distrito Nacional reincida en la viciosa práctica de cobrar arbitrios por la ocupación ilegal de los espacios públicos, una suerte de conspiración callada pero eficaz contra su propia institucionalidad, al propiciar la privatización de las estrechas calles de la zona colonial en beneficio de particulares que las utilizan como parqueos, igualmente lo es que el síndico Roberto Salcedo no haya colocado la solución a ese problema entre las prioridades de su gestión. Dicen por ahí, sin embargo, que nunca es tarde si la dicha es buena, por lo que Salcedo, que aspira a ser reelecto en el cargo, tiene la oportunidad de reivindicarse frente a los munícipes capitaleños asumiendo el solemne compromiso de campaña de dotar a la zona colonial de los parqueos que necesita, siempre y cuando estos quieran darle la oportunidad, con su voto, de enmendar un olvido tan lamentable.