Mamoneo .  Los principales sindicatos del transporte se han declarado en sesión permanente a raíz de las últimas alzas de precios de los combustibles, lo que  quiere decir que los usuarios deben esperar más aumentos en los pasajes, en tanto se  reportan nuevos aumentos de precios en productos de consumo masivo como el arroz, la carne de pollo, las pastas alimenticias y el aceite, entre otros.

Son noticias que leeremos y escucharemos  con mucha frecuencia de ahora en adelante, como parte de una  espiral alcista que va achicando cada día mas el ya menguado presupuesto familiar, mientras el gobierno todavía guarda silencio respecto a las medidas con las que se intentará contener la avalancha o, cuando menos, atenuar su impacto.  Ya se sabe, porque ha sido ampliamente divulgado por los medios de comunicación, que el presidente Fernández ha venido reuniéndose con técnicos de distintas áreas de su gobierno, escuchando recomendaciones,  sopesando opciones y alternativas para diseñar un plan de acción viable y sostenible, pero el anuncio no acaba de llegar.

Ese inexplicable mamoneo para anunciar unas medidas que se anticipan dolorosas por los sacrificios que impondrá  a todos, empezando por el propio gobierno,  genera inquietud  en  sectores que, por estar  bien informados, tienen una idea más cabal de la magnitud de lo que se nos viene encima, mientras la oposición política, que empieza a reaccionar tras la conmoción sufrida tras la derrota en las urnas, recarga sus cañones y apunta bien alto, hacia el presidente Leonel Fernández, a quien  Ramón Alburquerque, presidente del PRD,   responsabiliza  de que a estas alturas no se haya dicho o hecho nada simple y sencillamente  porque  no sabe qué hacer. Tal vez la situación no sea tan extrema como la pinta el beligerante político perredeísta, pero es evidente que mientras más vueltas le dé el gobierno a lo que tiene que hacer más se acrecentará el temor de quienes esperan lo peor de esas medidas.