Qué se dice

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 Va en serio.- Como quien les escribe no es experto, ni cosa que se le parezca, en esos asuntos, no estoy en capacidad de discutir la afirmación del doctor Marino  Vinicio Castillo de que el hecho constituye una violación  a la Constitución dominicana y los tratados internacionales de los que el país es signatario. Pero si el   propio Director de Etica e Integridad Gubernamental revela en su denuncia de   que agentes del FBI interrogaron en el país, sin una orden judicial ni la presencia de sus abogados, a dos empleadas  domésticas  del oftalmólogo Salomón Melgen, que ese interrogatorio contó con la anuencia del Procurador General de la República es probable  que la acción no tenga la  gravedad ni la connotación que le atribuye el conocido jurista. Ahora, una cosa sí parece evidente a juzgar por la visita a La Romana  de esos agentes: las autoridades norteamericanas se han tomado muy en serio la “trama” que vincula al doctor Melgen y al senador estadounidense Bob Menéndez en un caso de prostitución de menores en la República Dominicana.

  A todos.- Quizás la pregunta de la periodista lo agarró  fuera de base o simplemente lo traicionó el subconsciente, pero llamó mi atención que si bien el general Máximo Báez Aybar admitió  la necesidad de mejorar sustancialmente el salario de miseria que ganan los policías, como reclamó el sacerdote Fray Frankely Rodríguez durante el sermón de las siete palabras,  solo fue concreto y específico cuando anunció que la reforma policial que cocina a fuego lento el  gobierno del presidente Danilo Medina  contempla un aumento de salario para los oficiales de la institución. ¿Y todos esos policías rasos que andan por esas calles de Dios  jugándose la vida por tan solo 6,728 pesos al mes? Por eso pienso que, con toda seguridad, el vocero policial quiso decir que el aumento será para todos los policías sin excepción, empezando –lógicamente– por los que más lo necesitan.

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