De Toño a Figueroa-. Desde que la opinión pública tuvo conocimiento de la existencia de Ramón Antonio del Rosario Puente, mejor conocido como Toño Leña, se le ha señalado como un narcotraficante poderoso vinculado a la red del prófugo José Figueroa Agosto, de quien era, según un diagrama elaborado por la DNCD, jefe de operaciones en la región Este y uno de sus principales abastecedores.
Por eso sorprende un poco que ahora declare el fiscal del Distrito Nacional Alejandro Moscoso, a propósito del apresamiento de Toño Leña en Venezuela, su traída al país y su inmimente sometimiento a la justicia, que se reunirá con los fiscales que manejan el expediente para determinar si en verdad existen vínculos con el capo boricua, pues todos teníamos entendido, gracias a la machacona cantaleta de las autoridades antinarcóticas, que se trata de una complicidad establecida y demostrable. A menos que se trate de otro cuento de camino de las autoridades, y a la hora de probar de manera fehaciente esos vínculos en un tribunal de justicia todo se volverá sal y agua debido a que las pruebas de esa supuesta relación no aparecerán por ninguna parte.
Contento y colorao.- Muy contento y motivado se ha visto, en esta campaña electoral, al presidente del PRSC, don Carlos Morales Troncoso, quien el pasado domingo participó en un vistosa cabalgata en Bayaguana, municipio donde los reformistas van solos, atentos a sus propias fuerzas. Tan entusiasmado está el Canciller, que se le ha escuchado proclamar que el gran impulso que ha recibido el reformismo en esta campaña, sumado al desgaste del PRD, convertirá al partido del gallo colorao en la segunda fuerza política del país. Tal vez el canciller se pasó de contento, como dicen por ahí, pero no hay dudas de que la campaña le ha quitado el óxido a muchos reformistas que se habían declarado en retiro forzoso.