Definitivamente, Elías Piña no tiene dolientes en este gobierno. Ni siquiera porque ya ha transcurrido más de un mes desde la riada que arrasó puentes y destruyó caminos, dejando a 63 mil personas completamente incomunicadas, padeciendo los rigores de una aguda escasez de agua potable, alimentos y combustibles. La secretaría de Obras Públicas no ha podido, en todo ese tiempo, restablecer la comunicación de esa provincia con el resto del país, pero tampoco a Inapa le ha sido posible poner a funcionar nuevamente el acueducto que se llevó de encuentro la furia de las aguas. Por la Comisión Nacional de Emergencias es mejor ni preguntar, pues el vicealmirante Radhamés Lora Salcedo simplemente se ha desentendido de la suerte de esa gente, que ha descubierto de la peor manera posible hasta dónde llega la insensibilidad de nuestros funcionarios públicos.

[b]Buscando empleo[/b]

Es probable que la «agencia de empleos» que funciona los domingos en San Carlos, donde se ofrece, por la suma de RD$3,100 «pesitos», la oportunidad de obtener un trabajo fuera del país, no sea ilegal en el sentido estricto de la palabra, pero resulta obvio que sus promotores se están lucrando -y mucho- con la ingenuidad de nuestros compatriotas y su desesperación por salir, por cualquier vía, fuera del país. No es una casualidad, entonces, que sus promotores prefieran a gente del interior como «clientes», nucho más proclive a creer en cuentos de camino, ni tampoco que la mitad del dinero que tienen que pagar los aspirantes, 1,500 pesos, sea a cuenta de la «charla explicativa» que ofrece su propietaria. )Cómo podría ser ilegal un negocio que custodian un oficial, dos cabos y un raso del Ejército Nacional, como si se tratara de uno de los tantos puestos de venta de los mercados populares de Inespre?

[b]Parquímetros[/b]

El ayuntamiento del Distrito Nacional, con el síndico Roberto Salcedo en primera línea, parece seriamente empeñado en evitar que la empresa Parqueos Dominicanos logre su propósito de instalar 1,700 parquímetros en distintos puntos de la ciudad capital, en cumplimiento del contrato aprobado -según alega- el 18 de julio del 2002, pero antes de seguir adelante con ese pleito debe cerciorarse que cuenta con el respaldo de los regidores peledeístas, sobre todo si esa empresa cumple su advertencia de llevar su reclamo hasta las últimas consecuencias legales. Por eso es vital que averigue cuanto antes si esos regidores, que hasta ahora no han dicho esta boca es mía, siguen pensando igual que en los días finales de la gestión del merenguero Jhonny Ventura, cuando la mayoría de ellos -16 de 18- ofreció su respaldo a la controversial iniciativa.