Malas noticias.- Si es verdad, como publicaron ayer los principales periódicos del país, que vienen zumbando por ahí nuevas alzas en la tarifa eléctrica y las tasas de interés porque así lo establece la carta de intención presentada por el gobierno al Fondo Monetario Internacional, debemos prepararnos para lo peor, para sorpresa y desagrado de tanta gente que hasta ayer consideraba que no es posible estar mas mal de lo que ya estamos.
Son malas noticias que debemos recibir con gran preocupación, pues representan una nueva amenaza para nuestros exhaustos bolsillos. Y como es muy difícil separar, en este politizado país, la vida cotidiana de la política y viceversa, hay que decir que son malas noticias también para el candidato oficialista Danilo Medina, pues el palo ensebao por el que deberá treparse para lograr el favor del electorado en medio de una crisis económica atribuíble, con todas sus consecuencias, a los gobiernos del PLD, sería mucho mas resbaloso con una tarifa eléctrica por las nubes.
Provocación.- A excepción del Ministro de Economía Temístocles Montás, quien una vez concluido el paro del lunes dio la cara para decir que para el gobierno es prácticamente imposible cumplir con las demandas de sus organizadores debido a las limitaciones que le impone a nuestra economía la crisis mundial, el resto del gobierno ha hecho mutis. Una reacción que no sorprende, a decir verdad, pues la indiferencia ante los grandes males nacionales de parte de quienes nos gobiernan se ha convertido, con sus honrosas excepciones, en política de Estado. De todas maneras las declaraciones de Montás han caído muy mal y no solo a los organizadores de la huelga, que las consideran una provocación. ¿Cómo no darles la razón si el funcionario habla en nombre de un gobierno que a la hora de gastar (los costosos viajes presidenciales son un buen ejemplo) se comporta como si esa crisis mundial no existiera?